Con nariz roja y un sentido del humor exagerado se presentan cuatro integrantes de la asociación Clownidoscopio, agrupación que nació en Eivissa hace algo menos de un año. «Nació al amparo de la Escuela de clown de Eric dE Bont. Allí fue donde nos conocimos todos, y surge por el sentimiento de huérfano crónico que te da una vez que estás fuera de la escuela. Te ves sólo con tu nariz roja colgando y tú maletita. ¿Y ahora que va a ser de mi vida?», explica David, presidente de la agrupación.
El clown es «un fracasado eterno que acepta su fracaso y nace de ahí, y siempre vuelve a nacer desde su fracaso. Es un buen espejo para la vida», comenta. El clown es de naturaleza optimista y ve la vida como si fuera la primera vez que la ve.
Tras una año desde su creación, estos clowns no han parado. Trabajaron en el programa de actividades del Ayuntamiento de Eivissa en el Mercat Vell con talleres infantiles de reciclaje. Y ahora están volcados con su obra de teatro infantil Yurú en busca del fuego y los tres elementos, que se estrenará hoy a las 18,00 horas en la Escuela Internacional de Clown de Eric de Bont. «La asociación nace con la intención de hacer nuestros propios números y espectáculos y poder trabajar juntos, pero también surgió la necesidad de trabajar con los niños. Es ahí donde nació Reciclown, como una rama de la asociación que quiere trasmitir a los niños valores de respeto al medio ambiente. También hemos trabajado con Apneef y Apfem», comentó David.
Conciencia infantil
La obra de teatro que se representa el domingo tiene como objetivo trasmitir a los niños una conciencia medioambiental a través del juego y del teatro. «Es la primera obra que sale de la asociación y que está dirigida e interpretada por nosotros», explicó David. La obra se presentó por primera vez en el Festín de este año, el festival de teatro infantil que impulsa el Ayuntamiento de Sant Josep. «Allí tuvo muy buena acogida», comentó. Además, ya la han sacado fuera de la isla y han participado con ella en el festival italiano Arte in el bosco.
'Yurú en busca del fuego y los tres elementos' es una obra interactiva que quiere trasladar la conciencia medioambiental a los niños a través del juego y no entendido cómo una obligación. Trasmite la fuerza del grupo frente al individuo y como las diferencias no dividen sino que hacen más fuerte. «En las aventuras de Yurú aprenderemos a respetarnos unos a otros y a cuidar el mundo en el que vivimos», explican desde la asociación. Durante 60 minutos los niños entran en el mundo del protagonista que se debe reunir con el agua, el viento y la tierra para saber lo que les está pasando bajo el influjo del hombre.
N. Salazar