El director del Servei de Salut de Balears, Josep Pomar, ha decidido suspender temporalmente el proyecto de adscripción del servicio de emergencias a urgencias. Pomar dijo ayer que la junta del personal del 061 les hizo llegar un escrito el viernes pasado «en el que entendían que la integración de las urgencias, la polivalencia, les parecía razonable discutirlo en las comisiones técnicas y nos pedían dejarlo de lado o suspenderlo temporalmente». El director del Ib-Salut aseguró que se muestran «dispuestos a suspender temporalmente la aplicación del proyecto siempre que se constituyan estas mesas técnicas con la voluntad de incorporar las mejoras y sugerencias que puedan surgir de las mesas técnicas».
Defiende el proyecto
El Ib-Salut quiere que este proyecto «pase por un proceso de diálogo y en Eivissa había una comisión organizada». Pomar defiende, pese a la suspensión temporal, la idoneidad del proyecto para «acercar la organización del 061 a las áreas de salud y nos parece una mejora, es mirar al futuro, a la integración de otro tipo profesional más polivalente y ser coherente con toda la organización de la Conselleria al depositar las direcciones de área la responsabilidad de dirigir todo lo que pase en Eivissa». No obstante, la central de coordinación de llamadas del 061, que canaliza los avisos de emergencia, seguirá en Palma. La coordinación de llamadas de Eivissa ha sido una de las reivindicacionmes de los trabajadores de las Pitiüses. Pomar añadió, además, que si en los trabajadores «existe la percepción» de que puede afectar a sus condiciones laborales «es razonable que nos demos más tiempo para hablarlo».
Los trabajadores consultados, no obstante, recuerdan que esta oferta fue la planteada por la administración en la reunión de la junta de personal del 061 pero reclaman que se retire el proceso de adscripción y, a posteriori, tras el debate de las mesas técnicas «nos integraremos si esa es la mejor solución para todos, no hay ningún problema». También recordó que en la reunión del jueves el director del Servei de Salut «no nos supo decir cuánto tiempo habrá de parálisis» ya que la administración plantea una suspensión pero de carácter temporal.