Los responsables de la Pimeef, la CAEB, la Cambra de Comerç, la Federación Hotelera y Fomento del Turismo reclamaron ayer conjuntamente a las instituciones que apuesten decididamente por la creación de nuevos campos de golf y puertos deportivos como receta para atraer más turismo de poder adquisitivo y combatir la falta de turistas en invierno.
Los empresarios se han puesto de acuerdo para reclamar soluciones en «estos momentos difíciles para la economía». «Queremos manifestar nuestra enorme preocupación ante la falta de respuesta y actuaciones concretas por parte de los poderes públicos que ayuden a incentivar nuestra recuperación económica», indicaron los empresarios en un comunicado conjunto, en el que también piden que se reconsidere la decisión de incrementar el IVA en el sector turístico, «que debería establecerse como máximo en un 4%». Asimismo, creen que hay que seguir los principios del plan de marketing de la anterior legislatura, que no se ha aplicado.
El responsable de la Cambra de Comerç, Joan Tur Ripoll, reclamó a los políticos que «dejen de perder el tiempo» y hagan «lo que piden los empresarios y la sociedad», que es apostar por el golf y los puertos deportivos. «Es inaceptable la política de rechazo total a estos proyectos», dicen los empresarios, que aseguran que este tipo de infraestructuras generan una gran riqueza. Tur Ripoll matizó que no apoyan a ningún promotor en particular, sino que lo que les interesa es que se lleguen a hacer se y que haya inversores. En concreto, para los campos de golf propuso que se hagan en terrenos rústicos «degradados» cercanos a zonas turísticas consolidadas y que se rieguen con agua depurada, que ahora se «malgasta» tirándola al mar.
El presidente de los hoteleros, Juanjo Riera, indicó que tal y como están las cosas, Eivissa no puede competir con otros destinos del Mediterráneo. Por eso apostó por una mejora de las comunicaciones y propuso la instauración de un descuento de residente para todos los españoles. Asimismo, solicitó que se ofrezca una mejor formación a los trabajadores y más actividades para los visitantes, así como una reducción del gasto público.
Riera también recordó que siempre se criticaba que faltaba oferta de hoteles de cuatro o cinco estrellas, pero ahora la hay y no se ofrece nada a los clientes de este nivel adquisitivo, por lo que estos establecimientos podrían verse abocados al cierre. El responsable de la Cambra de Comerç lamentó asimismo que no se haya apostado por la segunda fase del Palau de Congressos, que atraería a muchos visitantes en invierno.
El vicepresidente de la CAEB, Joan Bufí, consideró que la economía de las Pitiüses «está en la UVI». No quiso concretar el número de campos de golf y puertos deportivos que hacen falta, pero indicó que no puede ser que se pretenda competir «ofreciendo campos de almendros». «Esto es una tomadura de pelo», dijo Bufí, que pidió que se deje de hacer «política barata». Asimismo, pidió arreglos en las carreteras y calificó la de Sant Joan de «camino». También criticó que finalmente no haya habido Turismo Sénior Europeo.
El presidente de Fomento del Turismo, José Tur Olmo, defendió que los campos de golf tienen una «gran rentabilidad» y pidió al Gobierno central que incentive el transporte aéreo y marítimo.
La Pimeef vaticina el cierre de muchos negocios
El presidente de la Pimeef, Mariano Riera, se mostró «muy preocupado» por la difícil situación que están atravesando los pequeños y medianos empresarios. De hecho, vaticinó que si las cosas no cambian, se producirá un cierre muy importante de empresas. «Hay que potenciar al aoferta complementaria, tenemos que apostar por las actividades para alargar la temporada», explicó Riera, que indicó que, de lo contrario, sólo «aguantarán un par de privilegiados y el resto tendrán que cerrar sus negocios».
«Es muy triste, porque la pequeña y mediana empresa representa el 90% del PIB y es posible que muchos nos vayamos al paro», lamentó el presidente de la Pimeef, que recordó que también se quejan de la lentitud de la Adminsitración. Respecto a la temporada, indicó que las noticias «son decepcionantes» y les hacen ser «moderadamente pesimistas».