El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Baleares, Antoni Real, advirtió hoy de que en los próximos dos años «peligran entre 400 y 500 empleos», lo que afectaría a entre el 15 y el 20 por ciento de los alrededor de 2.000 trabajadores de este sector en el archipiélago, debido, según señaló, a la «bajada escalofriante» de los precios de los medicamenntos genéricos aprobada por el Gobierno central.
Tras presentar en Palma un stand en el que farmacéuticos muestran a los ciudadanos cómo tendrán la piel en diez años si no la protegen del sol, Real indicó que los medicamentos genéricos han llegado a bajar a lo largo de este año un 30 por ciento, por lo que dijo que la última medida aprobada por el Ejecutivo de establecer un descuento obligatorio del 7,5 por ciento al Sistema Nacional de Salud en las ventas de los medicamentos excluidos del sistema de precios de referencia supone un «misil a la línea de flotación de la economía de las farmacias».
Así, aseveró que si hasta ahora, se calculaba que con la rebaja de los precios de los fármacos genéricos «peligraba un centenar de empleos» en el sector de la farmacia, ahora la cifra puede alcanzar los 500 en un periodo de dos años, a los que habrá que sumar los despidos que se produzcan en la industria farmacéutica y en el sector de empleados que trabajan en farmacias a través de laboratorios.
«Las perspectivas no son nada halagüeñas y se podría contemplar el cierre de alguna farmacia en Baleares, ya que acumular todos estas rebajas en los precios de los medicamentos en tan poco tiempo es muy difícil de asimilar», subrayó Real, quien consideró que el sector de la farmacia y de la distribución «tendrán que reaccionar de alguna forma», aunque dijo que no es partidario de convocar manifestaciones.