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Un rescate accidentado

Los intentos de recuperar el velero de 1936 provocan la ruptura del mástil

La belleza del barco accidentado, un velero de corte clásico, contrasta desde hace una semana con el estado en el que se encuentra. En la imagen superior se aprecia la rotura del mástil. A la derecha, trabajando sobre la cubierta | Guillermo Romaní

| Formentera |

Los trabajos para recuperar el velero «Taneeq», que encalló la semana pasada detrás del tramo rocoso que hay frente a la Savina, en la zona denominada Sa Sequi, tuvieron un mal comienzo ya que en una de las maniobras del equipo de la empresa ibicenca responsable de tratar de reflotar la embarcación los estais del mástil no aguantaron y se produjo un brusco balanceo que partió la parte superior del mástil. Se esperaba que ayer por la tarde se desplazara desde Eivissa una grúa que hoy intentará desencallar el «Taneeq», un clásico velero de madera, de líneas muy estilizadas, botado en 1936 en Boston y actualmente propiedad del pintor americano afincado en Formentera desde hace décadas, Robert Hawkins que lo adquirió en Saint Thomas, en el Caribe, en 1974.
El propietario quería sacarlo con una grúa pero para ello necesitaba que Costas y Parc Natural autorizaran que se colocara junto a la embarcación, pero se le denegó el permiso y ahora lo intentarán con otra grúa de brazo más largo para ver si desde el lugar en el que se autoriza su instalación es factible rescatar el barco. Los técnicos esperan poder retirar la embarcación diez metros de la orilla y entonces con flotadores remolcar el Taneeq hasta el puerto y posteriormente llevarlo a varadero para ver si es factible su reparación.

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