La tercera edición de la Semana de la Fotografía Submarina de Formentera cuenta este año con un colaborador de excepción: Pierre-Yves Cousteau, hijo del famoso investigador marino que trabaja en Formentera para implicar a los buceadores en la observación de la biomasa marina a través de unas sencillas tablas que utilizan en sus inmersiones. «El proyecto, que se llama Cousteau divers, es muy ambicioso y pretende hacer partícipe a todos los buceadores en la contemplación y la protección de la riqueza marina sin necesidad de que sean biólogos o expertos», explicó Nacho Pardo, organizador de este evento. Este proyecto supone crear una red de vigilancia en todo el planeta partiendo de la experiencia y las inmersiones de los millones de buceadores deportivos que hay repartidos por el mundo.
Pierre-Yves Cousteau, además de informar a los participantes en las actividades sobre este proyecto, también está realizando inmersiones de reconocimiento en las que está empleando sus propias tablas. «Se están obteniendo datos de las especies marinas que hay en Formentera», añadió Pardo. Por otro lado, él mismo se encargó de presentar el proyecto a principios de semana y de presentar, el miércoles, el documental que su padre había elaborado, La búsqueda de las profundidades. El destino de las tortugas marinas.
En cuanto a la competición fotográfica, aunque se han inscrito 94 personas, tan sólo 47 participarán en el concurso de imagen submarina. Al día se están haciendo alrededor de 8 inmersiones en grupos de 12 personas. Cada participante en el concurso puede hacer 160 descargas. Al final de certamen se habrán realizado unas 8.000 instantáneas submarinas, de las que habrá que elegir al ganador, que se conocerá mañana.