Los sindicatos representantes de los trabajadores del Consell, USO y UGT, acusan a la máxima institución de no haber dado solución a sus reivindicaciones «en toda la legislatura» y aseguran que «la pasividad, la falta de negociación y las declaraciones de buenas intenciones ya no son admisibles».
Por ello, han organizado un calendario de protestas que comenzó ayer con una primera concentración frente al hospital-residencia Cas Serres y que contó con la participación de medio centenar de personas, entre personal del centro y efectivos del Parque Insular de Bomberos. Ambos servicios dependen de las consellerias de Politica Social i Sanitaria y de Medi Ambient, respectivamente.
Sus reivindicaciones son tanto generales como específicas. Según explicó durante la protesta el bombero y delegado de personal de USO en el Consell, Rufino Díaz, en el ámbito general, denuncian la falta de adaptación de la máxima institución a la nueva Ley de 2007 para los trabajadores públicos, «que abrió expectativas en forma de derechos, carrera horizontal, vertical, concursos de movilidad, etc». Díaz destacó que, a principios de 2010, Consell y sindicatos firmaron un acuerdo «que abría la puerta a la carrera profesional». «Y a finales de 2011, nada de nada», se quejó. También remarcó que «la mesa sectorial de bomberos quedó rota hace meses» y que la mesa general de negociación «no se convoca».
«Nefasta gestión»
En el caso de los bomberos, acusan al responsable político [Albert Prats] «de nefasta gestión» porque «se ha lavado las manos de toda la problemática de este servicio y de su colectivo de bomberos».
Sobre sus reivindicaciones, Díaz explicó que siguen sin contar con un Jefe de Servicio, «que gobierne el Parque de Bomberos» y que sirva de «base organizativa». También denunció que no se han cumplido «los compromisos adquiridos, tales como el decreto organizativo del parque» y que desde hace seis meses carecen de «auto escalera». «Esto implica que si se produce un incendio urbano no tendríamos la capacidad de salvar a las personas afectadas. Es una temeridad», destacó, y recordó que, «en su día, al responsable político del servicio no se lo ocurrió otra cosa más que llevar a los bomberos un vehículo escalera de juguete».
En cuanto a las reivindicaciones de Cas Serres, Enrique Roca, delegado de UGT, se quejó de que «se están infiltrando contratos, por ejemplo en el sector de limpieza, con empresas para ocupar puestos que tienen que ser públicos». «También había un compromiso para instalar el aire acondicionado. Los usuarios y los trabajadores están a temperaturas excesivas durante el verano», aseguró, y criticó también que el Consell, a diferencia de otros sectores de la administración, «ha vetado internet en Cas Serres, lo que nos parece un agravio comparativo», concluyó.
La respuesta
PATRICIA ABASCAL
«Piden cosas que saben que no se pueden llevar a cabo»
La consellera de Política Social i Sanitaria, Patricia Abascal, aseguró que respeta la protesta pero indicó que «están pidiendo cosas que hemos hablado y que saben que no se pueden llevar a cabo». En este sentido, recordó que hay restricciones presupuestarias desde el Estado para crear nuevas plazas y que, por ello, deben contratar una empresa para la limpieza, e indicó que los sindicatos «saben» que el proyecto del aire acondicionado se está elaborado, a la espera de conseguir los 400.000 euros que cuesta. Sobre la carrera profesional destacó que «cuesta mucho dinero y que la institución no lo tiene» y sobre el tema de internet, indicó que «no es una necesidad imperiosa».
MIGUEL SEVILLA
«El auto escalera nos tiene preocupados»
Abascal respondió a alguna reivindicación de los bomberos y explicó, sobre la falta de Jefe de Servicio, «que se ha creado una plaza de suboficial». Por su parte, el Jefe de Bomberos, Miguel Sevilla, indicó que el auto escalera se está reparando en la Península y que lleva retraso por problemas electrónicos. «Nos tiene preocupados», indicó y avanzó que se prevé «adquirir un brazo electrónico».