Después de 70 años de haber sido una imagen venerada en el interior de la parroquia de Sant Elm, por fin ayer el Santo Cristo de la Sangre salió ayer en procesión para celebrar el Sábado de Pasión en Vila. Los cofrades de Nuestra Señora de la Piedad levantaron la imagen con gran solemnidad y respeto para empezar a recorrer las calles Cruz, Rimbau, Conde Roselló, Aníbal, plaza de sa Font y calle Antoni Palau para allí dar la vuelta y regresar con paso firma a la parroquia de Sant Elm. A su paso fueron muchas las personas que se mostraron algo sorprendidas al no ver procesionar a Nuestra Señora de la Piedad, pues hasta este año el Sábado de Pasión se había celebrado con ella. Tras la sorpresa inicial fueron muchos quienes se quedaron absortos contemplando con silencio y mucho respeto la riqueza de detalles que lucía el Santo Cristo de la Sangre, como el manto, la corona e incluso pelo natural. Nuestra Señora de la Piedad procesionará como única imagen de la cofradía el viernes que viene con motivo del Santo Entierro.
La idea de salir en procesión con esta imagen era un proyecto que tenían en mente en la cofradía Nuestra Señora de la Piedad y que finalmente este año han visto cumplido.
Los actos litúrgicos por Semana Santa continúan en Vila hoy con las bendiciones de palmas, procesiones y misas que tendrán lugar a partir de las diez de la mañana en la iglesia del Convent y la Catedral a partir de las diez de la mañana. Hasta el viernes que viene, que tendrá lugar la procesión del Santo Entierro a partir de las ocho y media de la tarde, se sucederán distintas procesiones por cofradías. En este sentido, la próxima será del Cristo del Cementerio mañana a partir de las ocho de la tarde.