La consellera de Mobilitat, Pepa Costa, revisará el proyecto de remodelación de la carretera de Sant Joan, que está en tramitación, para saber si tiene que modificar algún aspecto, entre ellos el carril bici adosado a la vía. «No es que estemos en contra del carril bici, pero se tiene que estudiar», explicó Costa, que recordó que en esta vía hay puntos en el que este vial se desvía por caminos exteriores y no va junto a la carretera.
La carretera de Sant Joan está pendiente de aprobación definitiva y ya ha recibido el informe de Medi Ambient, en el que se solicitan pequeñas modificaciones. «Queremos ver las alegaciones, es un proyecto que se hizo con bastante prisa, es caro y se revisará, queremos saber cuál es la demanda de la gente», añadió la consellera, que recordó que hay más de cien alegaciones.
Eso sí, mientras se estudia si se modifica o no se acometerá una actuación urgente de refuerzo del firme, ya que la calzada está «muy deteriorada» y necesita una «intervención urgente». Esto se hará porque las obras de remodelación «no podrán comenzar antes de un año», tal y como está la tramitación del proyecto.
Triángulo de Jesús
La consellera indicó que el proyecto del triángulo de Jesús, que incluye el desdoblamiento del primer tramo de la carretera de Santa Eulària y la construcción de una variante que desvía el tráfico de Jesús, es «prioritario» porque en esta zona hay mucha densidad de tráfico. «Sé que el proyecto estaba consensuado, pero me reuniré con los vecinos otra vez y sé que el Ayuntamiento de Santa Eulària también estaba de acuerdo», añadió Costa, que no sabe si podrán reformar toda la carretera de Santa Eulària, ya que no hay financiación. El presidente del Consell, Vicent Serra, matizó que plantearán una posible remodelación de toda esta vía si consiguen dinero. Preguntado sobre si se tendría que desdoblar toda la carretera, indicó que siempre atenderán a «criterios técnicos» porque es una carretera que tiene «uin tráfico importante y para nosotros lo más importante es la seguridad».
Respecto al modelo de carrreteras que seguirán esta legislatura, Costa se comprometió a minimizar el impacto territorial, aunque si hace falta desdoblar alguna carretera por cuestiones técnicas se hará.
Otra de sus prioridades es terminar la carretera de Sant Miquel, cuyas obras están bastante avanzadas. «Se debería haber acabado en mayo, pero ahora hay un modificado con un sobrecoste del 25% y las obras se han ralentizado por este motivo», añadió Costa, que indicó que les falta un informe del Consell Consultiu que ya han reclamado para evitar más retrasos.
También se impulsará el mantenimiento y la seguridad de las vías y se hará un plan de señalización para unificar la información turística.
Costa lamentó que los progresistas dieran «muchas vueltas a los papeles» y redactaran muchos anteproyectos, pero «realmente no han ejecutado muchas cosas».
El primer cinturón, sin alegaciones
Costa explicó que el proyecto del primer tramo del primer cinturón de ronda elaborado por los progresistas no ha recibido ninguna alegación ciudadana, por lo que solo están pendientes de una reunión con el Ayuntamiento de Vila y si éste da su visto bueno se podrían comenzar las obras en 2012 porque es un proyecto «muy necesario» y cuenta con presupuesto.Vicent Serra indicó que tendrán que ver si hay dinero también para la vía de ses Salines, ya que la de Sant Miquel costará más de lo previsto y quizás no se pueda llegar a todo.