La consellera de Salud, Familia y Bienestar Social, Carmen Castro, ha acusado al anterior Govern de haberse gastado más de 180.000 euros en máster para 14 directivos de Gesma que eran cargos de confianza en la pasada legislatura y en la actualidad están en la empresa privada.
La diputada del PP María José Bauzá le ha preguntado a Castro qué medidas se han adoptado para mejorar la eficiencia de la empresa pública Gesma, de la que ha dicho que tenía una cúpula directiva desproporcionada en la pasada legislatura con 20 directivos para gestionar dos hospitales con 154 camas operativas, cuando en Son Espases hay 16 para más de 800 camas.
Bauzá ha denunciado que las auditorías realizadas han descubierto «oscuras actuaciones» y una gestión «escandalosa» en Gesma.
En respuesta, Castro ha explicado que la principal medida ha sido decidir la extinción de Gesma y su integración en el Ib-Salut, que será efectiva a partir del 1 de enero de 2013, y la reducción de directivos de 20 a 8.
Castro ha defendido que eso permitirá racionalizar los procedimientos y centralizar la toma de decisiones en cuestiones presupuestarias y de régimen de personal e impedirá gastos como los realizados el pasado mandato.
La consellera ha reprochado a los anteriores gestores de Salud que gastaron más de 180.000 euros en máster para 14 directivos de Gesma, con una media de coste por máster de 13.000 euros por alumno, «todo en época de crisis».
Según Castro, algunos directivos hicieron más de un máster, se les pagaba además tres días de estancia en Barcelona con todos los gastos pagados y la mayoría de los cursos se hicieron en la escuela Esade, en la que el gerente de Gesma, Gabriel Fortuny, era profesor asociado.
«Es un claro ejemplo de lo que el pacto de progreso entiende por buena gestión, de la que ahora quiere dar lecciones», ha dicho Castro.
Anteriormente, en otra pregunta, Castro ha reprochado al PSIB que cree alarmismo después de que la diputada socialista Conxa Obrador haya dicho que la derogación del decreto de garantía de demora por parte del Govern generará «miedo masivo» y que la gente contrate seguros privados.
Obrador ha calificado la Conselleria de Salud de «república bananera» en la que el «último capricho» ha sido destituir a la cúpula del Ib-Salut, algo que considera que costará 150.000 euros en indemnizaciones.
La socialista ha acusado al Govern de hacer «cálculos temerarios» al aplicar medidas para aliviar la congestión de la sanidad pública como rebajar un 15 % en el IRPF el gasto por contratar seguros privados a discapacitados, mayores de 65 y familias numerosas.
«Nada de todo eso descongestionará la sanidad pública, el grueso de la descongestión es la derogación del decreto de garantía de demora que provocará el miedo masivo y la gente se asegurará privadamente», ha asegurado.
La consellera Castro ha acusado a Obrador de crear miedo y alarmismo y le ha pedido más rigor.
Castro ha explicado que la derogación del decreto de garantía de demora supone la adaptación del Govern a la decisión del Gobierno central de fijar un margen de 180 días para cinco procesos mediante real decreto.
No, si malos son todos; unos por hacerlo y otros por hacerlo porque los otros lo hicieron. Que los de antes la fastidiaran no legitima a los de ahora para incurrir en el mismo error.