El pleno del Consell debatirá hoy un plan de ajuste presentado por el conseller d'Economia i Hisenda, Álex Minchiotti, para poder acceder al nuevo crédito ICO para pagar facturas a proveedores. En este plan, el conseller plantea varias medidas para reducir gastos, entre ellas la subida de tasas y obligar a los ayuntamientos a que participen en el pago del servicio de extinción de incendios.
El tema de los bomberos ya había sido abordado en alguna ocasión cuando Tarrés era presidente, pero finalmente no se consiguió ningún compromiso efectivo de los ayuntamientos. Ahora, el conseller destaca que la institución insular se ha hecho cargo prácticamente en su totalidad el coste del servicio de extinción de incendios. «Si bien en un principio no todos los Ayuntamientos tenían obligación de asumirlo, a día de hoy el sostenimiento de este elevado coste debería sufragarse por parte de todos a excepción del de Sant Joan», dice el plan de Minchiotti, que pretende revisar los convenios para que los municipios paguen en función de su número de habitantes.
Actualizar tasas
El conseller también plantea en este plan una «actualización generalizada de las tasas». Por ejemplo, se alude al aumento de un 35,7% del importe de la matrícula de las escoletas del Consell. «El precio público ha experimentado respecto a 2011 un incremento de un 14,65% para una asistencia estándar de 8 a 14,30 horas», recuerda Minchiotti, que indica también en su plan que se han suprimido las bonificaciones de un 50% en determinados casos. En cuanto al resto de tasas, se recuerda que se contempla un incremento del IPC anual y también se defiende que el Consell tendrá un ingreso extra del Govern para el hospital Cas Serres de 1,5 millones, cantidad que se recogerá en el nuevo sistema de financiación. Minchiotti también promete en su plan seguir reclamando la mejora de la financiación, revisar la subida de tasas y contener el coste de los servicios.
En otro punto, el conseller destaca que la precaria situación de las cuentas del Consell se debe a un «grave problema financiero» y no a un problema estructural. De hecho, en el documento se asegura que si el Govern les pagara los 29,6 millones que les debe (cifra a 31 de diciembre), al Consell le sobrarían 5,2 millones, ya que los pagos que la institución tiene que realizar suponen 24,4 millones.
«Con una recaudación regularizada de los ingresos procedentes del Govern, la dificultad para atender el pago de proveedores no existiría», dice Minchiotti en el documento, que recuerda que el Consell ha asumido competencias que no le tocan y que el 90% de sus ingresos proceden de otras administraciones.
Reducción de pago de horas extra
El plan de ajuste contempla la reducción del pago de horas extra y sustituciones y a partir de 2012 tampoco se realiza la aportación al plan de pensiones, lo que supone un ahorro de 200.000 euros. Asimismo, los 500.000 euros que cuesta el servicio de drogodependencias serán asumidos por el Govern en 2013 y se ha reducido el coste de personal (altos cargos en 450.000 euros y contratos eventuales en 800.000). También se indica que se está en trámites para vender patrimonio.