Sant Josep se considera «solvente» para pagar el crédito destinado a los proveedores

El Ayuntamiento de Sant Josep se considera «solvente» para pagar el crédito a a diez años que solicitará para hacer frente a la deuda con proveedores que asciende a 3,8 millones.
Según explicó ayer en el pleno municipal la concejala de Hacienda, Marilina Ribas, «una media de los últimos tres años tanto de ingresos como de gastos, y una proyección hasta 2022», con lo cuál, el plan de ajuste envuado a Madrid no contiene ninguna medida como recorte de salarios o subida de impuestos, aunque sí actuaciones para mejorar la recaudación de tributos.
«Hemos visto que éramos solventes para pagar las amortizaciones y aún así, poder mantener un nivel de inversión muy bueno», destacó la concejala.
Por su parte, la edil de PSOE-Pacte, Paquita Ribas, señaló que el Consistorio «tiene en realidad un retraso en los pagos pero no necesitaba ninguna intervención estatal por alguna cuestión extraña». «Con lo cuál es normal que cuando hace el plan de ajuste dé positivo y facilidades para pagar», destacó Ribas, que criticó que el Estado «nos ponga en el brete» tener que pagar el 5% de interés.
«Nosotros hemos hablado de pagar préstamos con menos intereses y hemos oido muchas cosas en esta casa», criticó.
Por su parte, Ribas recordó que presentar las facturas ante Madrid «no es opcional» y recordó que el anterior equipo de gobierno «tuvo que pedir un ICO para pagar facturas».
Por otra parte, el pleno aprobó definitivamente los presupuestos para 2012, con unas cuentas que ascienden a 24.041. 776 euros una cifra muy similar a la del año pasado cuando se llegó a los 24.262.527 euros.
El grupo PSOE-Pacto votó en contra después de que se desestimaran todas sus alegaciones.
La principal novedad de los presupuestos de este año es que cumpliendo con la condición marcada por el Plan Económico y Financiero aprobado en 2011 se prevén unos ingresos de 28 millones de euros, cuatro más de los que está previsto gastar. El plan obliga a que exista este superávit para compensar el déficit presupuestario de los últimos años.
Se dedican 3 millones de euros a inversiones, no se han proyectado grandes infraestructuras y el dinero irá destinado principalmente a obras de mejora y mantenimiento de los espacios públicos y las zonas turísticas.