La mañana amaneció lluviosa pero cuando se inició la misa solemne de las Festes de Maig de Santa Eulària, oficiada por el obispo de Eivissa, Vicente Juan Segura, el sol fue protagonista. La homilía contó con la presencia de vecinos de la Villa del Río y de otros municipios, turistas, el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, el presidente del Consell, Vicent Serra, y varios consellers, así como todos los alcaldes y alcaldesas de la Isla.
Durante la misa y ante las autoridades, el obispo de Eivissa recalcó la importancia del Día de la Madre y señaló que para las próximas Festes de Maig la rampa de acceso al Puig de Missa estaría hecha para así facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida. El párroco de la localidad, Vicente Ribas, destacó, por su parte, el honor que suponía tener presentes «a las autoridades y al presidente del Govern». Aprovechó la ocasión, además, para expresar que «si Dios quiere» el año que viene la iglesia del Puig de Missa tendrá órgano. «Poco a poco lo iremos pagando», precisó.
Antes de acabar la misa, el obispo de Eivissa se dirigió en portugués a los integrantes del grupo folclórico de Portugal ‘Os camponeses', invitados por la colla de Es Broll para disfrutar de una de las fiestas más importantes en Santa Eulària.
A la exhibición de baile tradicional le siguió más tarde el desfile de carros engalanados y caballos por la calle Sant Jaume, una de las actividades que más expectación genera