El presidente del Govern, José Ramón Bauzá, ha anunciado este martes la supresión del impuesto de matriculación de las embarcaciones chárter de más de 15 metros de eslora en la inauguración de la conferencia 'The future of Superyachts', que ha tenido lugar en el Hotel Nixe Palace de Palma.
El Govern, en un comunicado, ha señalado que esta supresión permitirá la entrada y ampliará el mercado de los grandes yates. Bauzá ha afirmado, en este sentido, que esta reivindicación «es una medida justa que permitirá acabar con el impuesto de matriculación que crea un agravio con el resto de Europa y que nos perjudica seriamente».
Asimismo, el presidente de Baleares se ha mostrado convencido de que los ingresos directos e indirectos que se recibirían de los grandes yates son «muy superiores» a los ingresos que se recaudarían de la actual matriculación en chárters.
Además, Bauzá cree que es necesario «un marco fiscal y legislativo» que equipare Baleares a otros mercados competidores como Francia e Italia y ha aseverado que es necesario «modernizar y crear las infraestructuras por su ubicación, mantenimiento y reparación de los grandes yates».
La medida es pésima. ¿Por qué? Pues porque el que puede permitirse tener un yate puede permitirse pagar el impuesto de matriculación sin ningún problema. Esto no aumentará nada, hará que todo siga igual, salvo por el hecho de que los supermillonarios, que vendrían de toda maneras, se ahorrarán un pico.