La exconsellera de Salud, Familia y Bienestar Social, Carmen Castro, ha asegurado hoy que considera «un honor muy grande» haber formado parte del Govern, una experiencia profesional que ha calificado como «muy gratificante, a pesar de todo» y de las decisiones difíciles que ha tenido que tomar.
Castro ha comparecido ante los medios de comunicación tras participar en la reunión de hoy del Consell de Govern, para anunciar que ha comunicado su dimisión «por motivos única y estrictamente personales» al presidente de Baleares, José Ramón Bauzá, que la ha aceptado.
La hasta hoy consellera ha remarcado que la decisión de renunciar «se ha tomado y comunicado hoy» y que el presidente ha respetado los motivos que ha alegado, al igual que el resto del Consell de Govern y todo el equipo de la Conselleria.
Castro ha destacado que da por cumplido su objetivo de solucionar el problema que planteó la sentencia que anulaba los acuerdos de 2008 del anterior Govern sobre los complementos salariales de los médicos, lo que ha supuesto la desconvocatoria de la huelga de facultativos.
En su balance también ha remarcado que se ha resuelto con un acuerdo el pago de la deuda pendiente a los farmacéuticos y se ha puesto en práctica sin problemas el cambio de las aportaciones farmacéuticas en las recetas de los usuarios desde el 1 de julio.
Sobre su sustituto, Antoni Mesquida, Castro ha dicho que es un profesional de la medicina a quien le desea «todos los éxitos y toda la suerte en su nuevo cargo», y ha añadido que «humildemente» le ayudará en todo lo posible durante el traspaso de poderes.
Acerca del hecho de que, con su renuncia, por primera vez desde 1983 todo el Govern esté formado por hombres, Castro ha recordado que «el PP nunca ha estado de acuerdo con las cuotas». Tampoco habrá ningún representante de Ibiza en el ejecutivo, algo sobre lo que Castro no ha opinado, aunque ha insistido: «Aquí no hay cuotas».
Excedencia
Castro, que volverá a su plaza de médico en el Hospital Cas Serres de Ibiza, donde está en excedencia desde que fue elegida diputada en 2007, ha agradecido al presidente la confianza depositada en ella y también el esfuerzo del sector y de los profesionales sanitarios y sociales para mantener la continuidad de sus servicios en el actual momento de dificultades económicas.
«No ha sido nada fácil durante el primer año y todos mis esfuerzos, todo mi trabajo y el cien por cien de mi tiempo ha estado dedicado a conseguir la continuidad de la sanidad pública y de las políticas sociales», ha afirmado.
Ha remarcado que todo el personal de la Conselleria finaliza este año de trabajo conjunto «como una piña» y ha agradecido en particular su esfuerzo a los directores generales de Familia, Bienestar Social y Atención a Personas en Situación Especial, Margalida Ferrando; Gestión Económica y Farmacia del Govern, Martí Sansaloni, y Salud y Consumo, Federico Sbert, y a todo el equipo «del primero al último».
«Hemos sido una piña en la toma de unas decisiones muy difíciles pero que han sido muy necesarias para asegurar la continuidad de la asistencia sanitaria y las políticas sociales dentro del plan de equilibrio de la comunidad y de las medidas adoptadas por el ministerio de Sanidad y Políticas Sociales», ha señalado.
Castro ha rechazado también las críticas realizadas por el diputado socialista Vicenç Thomás, tanto hacia su gestión como por lo que puede suponer el nombramiento de Mesquida. «No es nadie para valorar ningún nombramiento después del follón que nos ha dejado, por ejemplo, con la sentencia que metió en un cajón», ha concluido.