El Ayuntamiento de Sant Josep estudia actualmente el tipo de sanciones que impondrá a los taxistas que hicieron una protesta espontánea contra el transporte ilegal el pasado jueves por la mañana en el aeropuerto de Eivissa, dejando sin servicio a cientos de turistas durante dos horas.
El Consistorio se basará en la ordenanza municipal para la prestación del servicio de transporte interurbano de pasajeros para decidir si la acción efectuada por los taxistas es una falta leve, grave o muy grave. Para decidirlo, también tendrá en cuenta el informe de la Policía Local, que contabilizó y anotó las matrículas de los 47 taxis que estuvieron aparcados en el aeropuerto como señal de protesta.
Los castigos
La ordenanza indica que, según el tipo de faltas, las sanciones podrán ir desde una amonestación hasta la retirada definitiva del permiso en caso de que la acción sea considerada como muy grave.
Las faltas leves tipificadas en la ordenanza tienen más que ver con actos negligentes como la carencia de pulcritud en el coche o en el propio taxista, así como discusiones o altercados entre compañeros.
Para estas cuestiones, se prevé una simple amonestación o la retirada del permiso por quince días.
Mientras, las faltas graves contemplan extremos más parecidos a una huelga como «la no asistencia a las paradas durante un semana sin causa justificada». En estos casos, las consecuencias conllevan la suspensión del permiso durante un periodo de tres a seis meses.
Por último, en el capítulo de las faltas muy graves, la ordenanza municipal contempla situaciones como «abandonar al viajero sin efectuar el servicio para el cuál ha sido requerido y sin haber una causa justificada», así como «conducir el vehículo estando embriagado» o desobedecer las órdenes de la Alcaldía «con relación a los servicios, objeto de este reglamento».
Para este tipo de faltas se prevén las sanciones más imporantes, como la «suspensión de la licencia o el permiso local de conductor hasta un año» o su retirada «definitiva».