El 1,06 % de los baleares tiene una conexión limitada a los servicios de banda ancha, hecho que sitúa a las islas por debajo de la media nacional del 1,33 %, según un estudio realizado por el Grupo de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (GTIC) de la Universidad Politécnica de Madrid.
Este estudio indica que Menorca es la isla «mejor conectada», con solo un 0,11 % de su población con conexión de 1 megabyte por segundo (Mbps), mientras que Formentera, con un porcentaje del 1,87 %, es la isla menos conectada.
El 1,26 % de los ciudadanos de Mallorca tiene conexión limitada, mientras que Ibiza consigue una cobertura de banda ancha en todo su territorio.
La principal causa de la cobertura limitada tanto en Formentera como en Mallorca es la diseminación de la población, ya que según el estudio, el 68,54 % de los baleares con conexión limitada es población diseminada, es decir, que no pertenece a ningún núcleo urbano.
Este factor hace inviable, en términos económicos, desarrollar tecnología terrestre, ya sea cableada o inalámbrica, para la provisión de banda ancha, por lo que el satélite es la opción más eficiente y asequible. según el estudio.
En cuanto a la distribución de la población con cobertura limitada, el 70,23 % reside en municipios de más de 10.000 habitantes. El estudio de la situación del acceso a la banda ancha en España y el papel del satélite en su universalización realizado por el GTIC muestra que más de 0,5 millones de usuarios españoles tienen un acceso limitado a la banda ancha, es decir, que no tienen acceso a la banda de más de 1 Mbps a través de ninguna tecnología terrestre.