El president del Govern, José Ramón Bauzá, ha optado por la línea continuista y ha decidido nombrar a Martí Sansaloni como nuevo conseller de Salut, Família i Benestar Social en sustitución de Antoni Mesquida.
Martí Sansaloni Oliver (Petra, 4 de agosto de 1982) tomará hoy posesión del cargo en un acto que se llevará a cabo a las 17.00 horas en el Consolat de Mar y que será presidido por José Ramón Bauzá.
El tercer conseller de Salut de la actual legislatura es licenciado en Farmacia por la Universidad Cardenal Herrera CEU de Valencia. Ha ejercido de adjunto de oficina de farmacia desde 2005 hasta 2011. De hecho, es hijo de la propietaria de la farmacia Oliver de Palma, y ha formado parte de la Conselleria de Salut desde que Carmen Castro fuera designada consellera.
Experiencia
Sansaloni ha ejercido como director general de Gestió Econòmica i Farmàcia del Govern y el cargo de vicepresidente del IB-Salut tras el cese de Juan José Bestard al frente del IB-Salut por lo que, a pesar de su juventud, cuenta con experiencia en este sector.
El nuevo conseller de Salut no quiso hacer ayer declaraciones. A través de un WhatsApp afirmó que estaba bien y no quería hacer ningún tipo de declaración.
Martí Sansaloni fue, desde el primer momento, la apuesta de Bauzá para relevar a Antoni Mesquida. Lo había comunicado a su círculo más próximo pero tardó 24 horas en hacerlo público. Hasta las 20 horas de ayer, el Govern no lo anunció oficialmente. La dimisión de Mesquida se anunció formalmente a las 19 horas del miércoles. Sansaloni es una apuesta política de futuro y, a la vez, conoce las interioridades del departamento. Cuando trascendió la dimisión de Mesquida, Bauzá no había hecho todas las llamadas necesarias como para poder dar el nombre del sucesor. Aunque no lo admite en público, el nombramiento de Mesquida (que también fue una decisión personal suya) fue un error y así se lo hicieron ver algunas voces del PP.
Al apostar por Sansaloni, el president también opta por seguir con un Govern formado exclusivamente por hombres. Bauzá dice que no cree en las cuotas. El Ejecutivo de Balears es el único de España sin mujeres.
Mi queja es referente a los minusvalidos,encuentro que no se puede aceptar que un minusvalido que cobra setecientos euros al mes ,y algunos cobran menos,tengan que pagar veinte euros para pedir una revision de su minusvalia,o para la de movilidad reducida,y que tarden tres meses en llamarlos, Espero se tanga mas sensibilidad con este colectivo