El mal tiempo tiene en vilo a los sindicatos que han decidido no desconvocar las manifestaciones previstas para hoy en Vara de Rey (18,00 horas) y la Plaza de la Constitución (12,00 horas), de Formentera, con la esperanza de que el temporal que ayer azotó a las Pitiüses amaine y permita que las protestas coronen la segunda jornada de huelga general de la legislatura.
CCOO, UGT y USO comenzaron anoche y hoy temprano con los piquetes informativos frente a los servicios de recogida de basura de Sant Antoni y Vila para que sus trabajadores secunden la huelga, y también tenían previsto acudir al aeropuerto a pedir a los empleados que se sumen al paro. En la terminal ibicenca habrá además una protesta de los trabajadores de Iberia, prevista para las 10,30 horas, contra los 4.500 despidos que anunció la compañía aérea.
Pancartas con humor
Los sindicatos continuarán con piquetes informativos desde las 9,00 horas en los paseos de Vara de Rey, Passeig de ses Fonts y s'Alamera, para informar y pedir la adhesión de los ciudadanos a una jornada de huelga, que busca mostrar un rechazo masivo por parte de los ciudadanos a los recortes en sanidad, educación y servicios sociales, aplicados por el Ejecutivo central y autonómico.
Desde el sindicato de la enseñanza, STE-i, hoy será un día de seguimiento de la huelga en los centros educativos de la Isla, en alguno de los cuáles también habrá un piquete informativo, como el que está previsto a las 8,00 horas en la puerta del instituto Santa Maria.
Con respecto a los preparativos, el portavoz sindical, Pere Lomas, aseguró que las pancartas de los profesores prometen sátira y humor con «langostas, Cabrera, y champagne», en referencia a la excursión del conseller d'Educació, Rafel Bosch, junto a su homólogo de Medi Ambient, Gabriel Company, por el Parque Nacional mallorquín, utilizando recursos públicos.
«Esperamos que la incidencia de la huelga haga rectificar estas políticas que nos están conduciendo a unas pérdidas galopantes del derecho del estado de bienestar», afirmó Lomas.
La FAPA también anunció que se sumará al paro y pidió a los padres de alumnos que no lleven a sus hijos al colegio.
Conchi Romero, la presidenta, afirmó también que se ha pedido que los centros garanticen el derecho a la tener clase para aquellos niños cuyos padres no están de acuerdo con la huelga.