El 46,2 % de la población balear, lo que supone 515.092 personas, viven en situación de precariedad en las islas, debido «al repunte del desempleo, a la reducción salarial y a los ajustes llevados a cabo por el Gobierno en los últimos años», según un informe de Técnicos del Ministerio de Hacienda.
El estudio titulado «Adiós a las clases medias» se ha presentado esta mañana en el XII Congreso Nacional de los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) en Bilbao y señala que la crisis ha sumado 68.500 personas más a esta situación de precariedad en las islas.
Para elaborarlo, los analistas han tomado datos oficiales del propio Ministerio y han calculado la tasa de precariedad que viene dada de la suma de familias cuyos ingresos en su conjunto sean iguales o inferiores a 12.000 euros brutos al año, además de los hogares que no tienen ingresos de ningún tipo.
Los adultos sin ingresos en el archipiélago llegan a 76.107, mientras que el número de mileuristas a 438.986; de los cuales, 395.376 son asalariados y 43.610 autónomos
Euskadi y Navarra son las Comunidades Autónomas con la tasa de precariedad más baja, con un 24,11 % y un 22,20 % respectivamente, y por contra, Extremadura lidera la tabla con un 53 % y 590.000 personas adultas en esa situación, seguida de Andalucía con una tasa de 51,1 % y casi 4,3 millones de adultos afectados.
En toda España, más de 20,6 millones en edad adulta, es decir el 43,74 % del censo, viven en situación de precariedad.
El estudio ha reunido en Bilbao a más de doscientos representantes de ese colectivo para analizar «la brecha salarial surgida en España entre las clases medias y bajas y los grandes patrimonios como consecuencia de la crisis económica».
El presidente de Gestha, Carlos Cruzado, ha explicado que desde el año 2007 se han incorporado a ese índice casi 2 millones de españoles y entre los más afectadas por la crisis, 16 millones de personas en situación de precariedad corresponden a «mileuristas asalariados».
Así, ha denunciado, en estos últimos años la diferencia entre las rentas de los más desfavorecidos y los grandes patrimonios se ha multiplicado y «todavía esa brecha puede ir a peor si no hay una modificación de las políticas fiscales» con las que tanto el Gobierno de PSOE como de PP «han afrontado la crisis, porque son injustas y además están siendo ineficaces».
Las clases medias y bajas se ven afectadas por subidas de impuestos y el pago del IVA, mientras que se «oculta una bolsa de rentas de capital y plusvalías de dimensiones gigantescas en manos de accionistas que no tributan en el IRPF», ha reflexionado.
El informe explica que los recortes aprobados en los últimos años por el Gobierno han impactado en el poder adquisitivo de las rentas inferiores a los 33.000 euros anuales, que representan al 85% de los trabajadores, y que son las que han soportado el mayor peso de los ajustes fiscales como la subida del IRPF, el aumento del IVA o la reducción de salarios y supresión de la extra de Navidad a los funcionarios.
Carlos Cruzado ha opinado además que la denominada «amnistía fiscal» para empresas y grandes fortunas que cotizaban en el extranjero, va contra «el principio de igualdad constitucional» y representa «un agravio comparativo con quienes sí han incumplido con sus obligaciones fiscales"
Además, esa medida puede tener «una repercusión negativa en la conciencia fiscal en España».
Para contrarrestar esa «brecha» entre los españoles, los técnicos del Ministerio de Hacienda han propuesto una serie de iniciativas «que por sí solas permitirían recaudar más de 60.000 millones de euros anuales sin necesidad de ampliar las diferencias salariales.
En concreto, reclaman las inspecciones sobre grandes corporaciones y patrimonios, que concentran más del 70 % de la evasión fiscal y la puesta en marcha de un impuesto sobre la riqueza de manera que «el tipo efectivo de esta nueva tasa triplique» al actual impuesto de patrimonio.