El Govern balear aplica ya desde principios de enero la subida del canon autonómico del agua, un impuesto que cobran las empresas suministradoras y que en el caso de los hogares medios de Eivissa y Formentera supondrá un aumento de más del 10% de la factura. Así lo ha calculado Aqualia, empresa suministradora de todos los municipios de Eivissa y Formentera, que considera que quienes más lo van a notar son los dueños de los hoteles, donde el incremento rebasará con creces ese 10%. «El canon tiene una parte fija y otra variable y la variable se ha hecho por bloques, de modo que quien más consume paga más», explicó una portavoz de la empresa, que recordó que además el canon será más alto en función del número de camas que tenga el establecimiento.
De todas formas, Aqualia no ha podido calcular todavía lo que se puede recaudar de este impuesto en las Pitiüses porque dependerá mucho del consumo. «Está comprobado que el ciudadano, ante una subida del agua, lo que hace es disminuir el gasto, así que no se puede prever», remarcaron desde la empresa suministradora.
Aqualia quiso dejar claro también que el aumento de la factura no es cosa de ellos, sino que es un canon del Govern. «Nosotros somos meros recaudadores, en la factura se especifica lo que se cobra por consumo de agua y lo que es por el canon del Govern», indicó la portavoz de la empresa, que remarcó que esta subida no les beneficia porque puede hacer que baje la demanda y ellos recauden menos.
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