El Govern ha decidido retirar de la fase de exposición pública la ley que abría la puerta a nuevas canteras y que posibilitaba la regularización de muchas instalaciones de las Islas que se encuentran en situación alegal. La razón es que Vicepresidència, el departamento que ha elaborado el texto, quiere consensuar el documento con los representantes de la oposición y con los sectores afectados por esta reforma legislativa.
La aprobación inicial del anteproyecto y su publicación en el BOIB del día 25 causó sorpresa porque el documento ni siquiera se había llegado a negociara abiertamente con los afectados. Por esta razón, el Govern ha decidido suspender la fase de alegaciones y negociar el documento sin prisas.
Fuentes del Ejecutivo precisaron, en cualquier caso, que el objetivo de la ley no es permitir la apertura indiscriminada de nuevas canteras, sino sólo de aquellas que sean necesarias por circunstancias realmente excepcionales. Las mismas fuentes aseguraron que la intención última es racionalizar el sector y arreglar situaciones ‘alegales' en las que se encuentran muchas de las canteras operativas.