Cerca de cuarenta trabajadores de las residencias de Can Blai y Can Raspalls se concentraron ayer en sus respectivos centros de trabajo para protestar por el retraso que están sufriendo en el pago de sus nóminas. A estos trabajadores también se sumaron a la protesta los que trabajan en los pisos tutelados dependientes de Benestar Social. En total hay un centenar de empleados afectados por este retraso.
Las concentraciones se realizaron a las 14.30 horas y pocos minutos después desde el Consell confirmaron que se había aprobado una modificación presupuestaria de 350.000 euros para solucionar la falta dinero. «El traspaso de ese dinero se hará efectivo mañana (por hoy) a las 8 horas en cuanto abran los bancos y por tanto las nóminas se podrán pagar a partir de mañana (por hoy)», señaló ayer un portavoz del Consell. El lunes, el conseller d'Economia, Alex Minchiotti, garantizó que los trabajadores cobrarían «de inmediato».