La Associació d'Apicultors d'Eivissa ha reclamado al Consell d'Eivissa que modifique el modo de fumigar para acabar con la procesionaria del pino con el fin de proteger las abejas y, con ello, el producto final: la miel. «Hay otras maneras de controlar esta plaga, otras formas no tan invasoras», manifestó ayer Vicent Marí, integrante del colectivo de apicultores. Para Marí, la actual forma de acabar con la procesionaria del pino, que se realiza de forma aérea y con insecticidas, afecta a la producción de las abejas, que pierden su orientación al verse afectado también el polen de las flores que se ubican en los alrededores de los pinos tratados por la procesionaria.
Esto ha provocado, según la Associació d'Apicultors d'Eivissa, que muchas de estas abejas acaben muriendo y descendiendo así la producción de miel de Eivissa. Para Marí, existen otros métodos contra la plaga del pino, como puede ser el de las trampas con feromonas, método nada invasivo con las abejas.