El Consell d'Eivissa mantiene una investigación abierta acerca de una denuncia sobre alquileres ilegales en la urbanización de Sant Antoni Sol y Soñar, a raíz de la denuncia de uno de los propietarios, que también expresó su queja por los ruidos ya que el acceso a la piscina está abierto todo el día.
La institución insular, la administración competente en Inspección de Turismo, abrió un expediente de diligencias previas sobre la denuncia realizada el año pasado. Desde el Consell, aseguraron que «el expediente se mantiene abierto».
El Ayuntamiento de Sant Antoni, por su parte, aseguró ayer que pedirá al Consell que haga una inspección para que verifique si estos apartamentos de particulares se alquilan como turísticos.
El propietario de uno de lo apartamentos de la urbanización, Alfredo Naranjo, denunció el año pasado los alquileres irregulares en la comunidad en el que los turistas «se desmadran y hacen mucho ruido, por la noche, en la piscina».
Según el vecino, la situación no ha mejorado este verano lo que ha ocasionado que interponga una denuncia a las administraciones de las dos urbanizaciones afectadas ya que comparten la piscina. «Los vecinos no pueden dormir en verano por los ruidos de noche y de día de dos urbanizaciones en la piscina (...), no hay seguridad nio responsables». Asegura, además, que en las dos urbanizaciones «se alquilan muchos pisos a turistas y a familias, que son alquileres ilegales y no me hago responsable de los daños que puedan ocasionar», según se recoge en el texto de la denuncia.