La exgerente del CDEIB, Antónia Ordinas está de nuevo en prisión. Tras aceptar una condena de tres años y ocho meses por el ‘caso Scala', solicitó el ingreso voluntario en la cárcel al igual que Kurt Viaene, quien entró en el centro penitenciario el viernes, y el exconcejal del PP en Lloseta, Felipe Ferré. Los tres han sido los principales ‘arrepentidos' que sostuvieron las acusaciones contra el exconseller de Industria, Josep Juan Cardona, condenado a su vez a 16 años de prisión. Éste último también está preso, si bien de forma preventiva ya que él sí recurrirá la sentencia ante el Tribunal Supremo.
Ordinas entró en torno a las once y cuarto en el centro penitenciario de Palma al que llegó acompañada de su mujer, la soprano Isabel Rosselló. Ésta fue también condenada en el juicio, si bien su pena de un año y medio de cárcel será suspendida y no tendrá que entrar.
La petición de firmeza de la sentencia y de ingreso voluntario por parte de Ordinas, Viaene y Ferré les permitirá tener también ventajas a la hora de solicitar beneficios penitenciarios como la obtención de permisos o el paso al tercer grado que supone el poder salir de la cárcel durante el día. Con el ingreso de la exgerente del CDEIB se cierran dos semanas en las que hasta seis exaltos cargos de la administración han entrado en prisión por causas de corrupción, bien por sentencias firmes como Miquel Nadal y Francecs Buils, bien de forma voluntaria como los del CDEIB o bien de forma cautelar como Cardona y Maria Antònia Munar. Tras las últimas decisiones judiciales sólo queda pendiente el ingreso del redactor de los discursos de Jaume Matas, Antonio Alemany, cuya orden de ingreso para cumplir los dos años y tres meses a los que fue condenado aún no ha sido tramitada y se da por hecho que lo será en septiembre.
Ordinas fue una de las primeras ‘arrepentidas' en el ‘caso Scala' y ha sido condenada por formar parte de una trama que desvió alrededor de seis millones de euros públicos.