Las aerolíneas que operan en las rutas entre Balears y la Península han incrementado desde 2012 las tarifas aéreas más baratas en más de un 30%, afectando ello a la comercialización de billetes y a la propia conectividad aérea.
El Ministerio de Fomento, que mantiene una opacidad absoluta al respecto, simplemente se limita a constatar el aumento de precios, así como la reducción de frecuencias, principalmente en los meses de temporada baja y media por el efecto de la crisis económica que afecta a nuestro país y que ha provocado, en el último año y medio, una caída en picado de las cifras estadísticas del mercado doméstico en los tres aeropuertos de Balears.
Las quejas de las asociaciones de consumidores motivaron a mediados del pasado año que el Govern solicitará de forma oficial al Ministerio de Fomento si era verdad o no que la desaparición de Spanair había provocado un aumento de las tarifas en el precio de los billetes.