La estación de buses del Cetis cumple hoy un mes cerrada después de que el Consell ordenara la salida tras el dictamen del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que suspendía el decreto de Alcaldía del Ayuntamiento de Eivissa. En este sentido, el TJSB consideró que el Ayuntamiento invadió competencias de la máxima institución insular cuando ordenó el traslado a la estación.
Los empresarios de autobuses destacaron ayer que en este mes operando de nuevo en Isidor Macabich, donde se ubican ahora todas las paradas para recoger y dejar pasajeros, «no ha habido grandes problemas», aunque piden al Ayuntamiento de Eivissa que mejore la «iluminación de las paradas de Sant Antoni y Vila [ubicadas frente a la antigua Delegación del Gobierno] y que coloquen una o dos marquesinas más para hacer más cómoda la espera a los usuarios porque son dos de las líneas que tienen más tráfico», afirmó ayer Alfonso Ribas, presidente de Apebús, quien precisó: «Pienso que el Ayuntamiento lo que tiene que querer es todo lo mejor para el usuario, entonces cualquier mejora que se haga en las paradas será buena».
Ribas explicó que a los conductores de los buses «no les llegan quejas sino comentarios positivos por la vuelta a Isidor Macabich; están contentos y agradecen que hayan vuelto los buses a la avenida y sobre todo que hayan bajado los precios en comparación con lo que valían los tickets en el Cetis».
Por su parte, la directora de la estación del Cetis, Anna Sagalés, explicó que no existen novedades en cuanto a las demandas que habían interpuesto a las empresas Voramar el Gaucho, Vilás y Autobuses San Antonio (el juez admitió a trámite la que interpusieron contra Vilás) por el impago del complemento tarifario de cinco céntimos durante los cuatro meses que estuvo en funcionamiento la estación . Sobre esto, el presidente de Apebús comentó que «no tenemos conocimiento oficial de estas denuncias porque no nos ha llegado nada».