Formentera generó durante el año pasado 8.728,45 toneladas de residuos, 358 menos que en 2012, según se desprende de un informe que ofreció ayer la consellera de Medi Ambient, Indústria i Energia de la menor de las Pitiüses, Sílvia Tur.
Teniendo en cuenta los datos obtenidos a través de la información derivada de las toneladas de residuos que se transportan a la Planta de Transferència des Cap de Barbaria para su posterior traslado a Eivissa, la mayor parte de estos residuos fueron papel y cartón, con 778,48 toneladas, seguidos de vidrio, con 760, y de envases, con 244,46.
También se recogieron durante el año 2013 un total de 103,69 toneladas de electrodomésticos y residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, casi 22 toneladas menos que en 2012 y treinta menos que en 2011. Esta bajada progresiva podría deberse, según el Consell de Formentera, al descenso en la compra de nuevos electrodomésticos debido a la crisis económica y a que los ciudadanos cada vez optan más por reparar los aparatos estropeados en vez de adquirir uno.
Resultados positivos
Según el Consell de Formentera, si se comparan estos datos con los de los años anteriores, desde la puesta en marcha del servicio de reciclaje en el año 2010, la tendencia ha sido un poco irregular, «aunque siempre se han registrado datos positivos en comparación con otras comunidades».
Concretamente, Sílvia Tur aseguró que, teniendo en cuenta el volumen de residuos que se asocian a cada habitante censado en Formentera, los resultados «son exponencialmente positivos». Algo que según la consellera, pone de manifiesto «las buenas prácticas de la ciudadanía, tanto por el que hace bien la separación en origen de los residuos, como por la puesta en marcha de los medios que desde el sector servicios se ofrecen a las viviendas y establecimientos turísticos».
Además, los datos demuestran que funciona «el trabajo de los técnicos de medio ambiente así como los esfuerzos en educación y concienciación ambiental llevados a cabo a través de las campañas informativas».