Decenas de personas se sumaron ayer a la celebración del Domingo de Ramos que tuvo lugar tanto en la iglesia de Sant Elm como en el municipio de Santa Eulària y que destacó por ser un día caluroso propio de la temporada estival.
En el primer caso, y tras la celebración de la misa, los miembros de la cofradía del Santo Cristo del Cementerio sacaron a hombros la talla de La Borriquita para trasladarla en procesión hasta la iglesia de Santo Domingo. La imagen estuvo acompañada durante todo el trayecto no solo por decenas de feligreses sino también por la banda de música de la Cofradía del Santo Cristo del Cementerio.
[Más información en Kiosko y Más y en la edición impresa]