Al Consell d'Eivissa no le preocupa que con la nueva Ley de Minas puedan autorizarse nuevas canteras en zonas protegidas por la Ley de Espacios Naturales (LEN) porque en todo caso éstas no serán a cielo abierto, sino cerradas. Así lo confirmó ayer el conseller de Territori, Mariano Juan, que indicó que en principio no pondrán más objeciones a la normativa, que se tramitará a partir de ahora en el Parlament balear.
Según Juan, estas canteras no tendrían «impacto», por lo que consideran que el Govern ha hecho caso de las alegaciones que presentó el Consell, que no veía con buenos ojos que hubiera explotaciones a cielo abierto en zonas protegidas. El conseller cree que es muy difícil que llegue a autorizarse una cantera en este tipo de suelo porque se primarán las ampliaciones de las ya existentes y si aún tienen capacidad de suministro no se dará permiso a otras nuevas. Y después hay otro factor y es que una cantera cerrada o subterránea «no sería rentable». «Es muy complicado que se autorice, pero si fuera así sería todavía más difícil que diera dinero», agregó el conseller, que indicó que por eso no tienen previsto pedir ningún cambio más dentro de la ley.
Según Juan, esta normativa es positiva porque permitirá «regular el sector», ya que la ley actual es pre-constitucional, del año 73. Destacó también la creación de la figura de un consejo de la minería, que emitirá opiniones tanto consultivas como vinculantes. El Consell d'Eivissa formará parte de este consejo y también está presente en la Comissió balear de Medi Ambient, un órgano que también pide informes a Eivissa en caso de que se tenga que abrir una cantera en su territorio. Por eso, pese a que la institución ibicenca pierde la capacidad de decidir directamente sobre si quiere una cantera o no (antes en teoría tenía que dar un interés general, aunque nunca se ha dado tal circunstancia), el conseller de Territori está satisfecho porque cree que se tendrá en cuenta al Consell al estar representado en estos órganos.