La organización medioambiental suiza Ocean Care, que cuenta con gran prestigio y seguimiento a nivel internacional, se suma a la Alianza Mar Blava para luchar más en el plano internacional contra las prospecciones petrolíferas en el Mediterráneo. Según destacó la Alianza en un comunicado, Ocean Care es asesor especial de la ONU sobre protección de medio ambiente desde el año 2011, lo que ayudará a visibilizar a nivel internacional la oposición a los proyectos de búsqueda de hidrocarburos que acechan a Balears, como el de Cairn Energy en el golfo de Valencia.
Para Ocean Care, la exploración y posterior explotación de hidrocarburos en el Mediterráneo y, en concreto, en Balears es una actividad «demasiado peligrosa». no solo para el medio ambiente sino para el turismo, la economía y la pesca. «Si el Gobierno español aplicase adecuadamente las decisiones internacionales existentes conducentes a reducir el ruido subacuático, la declaración de impacto ambiental que se está elaborando para los proyectos de prospecciones petrolíferas en el Mediterráneo sólo pueden contener una conclusión negativa para esos proyectos», explicaron.
Visibilidad
«Se trata de una unión y de una colaboración muy importante porque es una organización con un poder de movilización muy destacado. Prueba de ello son las 200.000 firmas de alemanes contra los sondeos petrolíferos en Balears que han recogido desde el 1 de agosto. Esto es una demostración clara de que hay una oposición evidente no solo a nivel balear sino en el plano internacional contra estos proyectos», destacó Carlos Bravo, uno de los portavoces de la Alianza, quien tiene claro que con la unión de esta organización en la lucha se conseguirá más visibilidad en foros internacionales en los que hasta ahora no podían llegar o no tenían una representación visible. Bravo subrayó, además, que Ocean Care antes de integrarse en la Alianza ya se había reunido con el Ministerio de Medio Ambiente.
El portavoz de la Alianza explicó que la importancia de esta entidad radica en que, además de que Ocean Care es asesor especial de la ONU, es también una entidad asociada al Acuerdo de Mónaco sobre la Conservación de Cetáceos en el mar Negro, el Mediterráneo y la zona atlántica contigua (ACCOBAMS). «España ratificó este acuerdo en 1999, por lo que se obliga a proteger a los cetáceos en el Mediterráneo. Teniendo en cuenta que el gobierno francés ha prohibido las prospecciones en el Mediterráneo se podría avanzar más en este tema», precisó Bravo.
Sobre si las 86.000 alegaciones al proyecto de Cairn Energy en el golfo de Valencia han empezado a llegar al ministerio de Industria (que deberá remitirlas a Medio Ambiente para que éste elabore el estudio de impacto ambiental), el portavoz de la Alianza precisó que ya acumulan seis meses de retraso y que únicamente han recibido las de Castellón y Valencia. En septiembre consultará de nuevo el estado del expediente del proyecto. «No creo que haya avanzado nada en agosto, pero lo que sigue estando claro es que el retraso continúa aumentando», apuntó. La Alianza, mientras tanto, continúa activa y se reunirá el 11 de septiembre para redifinir su estrategia de cara al otoño-invierno de este año.