Ayer por la mañana se reunieron los sindicatos de enfermería del hospital Can Misses con la gerencia para tratar el tema de la consolidación del personal. Desde dirección comunicaron a los representantes sindicales que hoy les pasarían la plantilla de trabajadores y que iban a proceder a la consolidación de los puestos de 40 enfermeras para el hospital y ocho para primaria, un auxiliar de enfermería, 21 auxiliares de atención primaria y 17 en el hospital a parte de otros como celadore, especialistas en medicina interna, jefaturas de servicio y de sección, según explicó la representante sindical del CSIF-F María Teresa Arce. Se trata de un cambio en la plantilla donde trabajadores eventuales pasan a ser interinos.
«Nosotros consideramos que es consolidación porque son las contrataciones que se van haciendo mes a mes para cubrir las necesidades y que ahora se consolidan», comentó Arce, y señaló que esta consolidación «no es suficiente porque se quedan en el sitio donde ya estaba trabajando, por tanto todavía va a hacer falta más personal», de todas maneras reconoció y agradeció el esfuerzo de gerencia por las mejoras laborales. Esta misma petición la trasladaron a la gerencia del Área de Salud de Eivissa y Formentera con cuyos representantes volverán a reunirse mañana a las 8,30 horas.
Según fuentes del Área de Salud, la contratación de personal debe ir ligada a la cantidad de pacientes y no a los metros cuadrados del hospital, sin embargo, Arce asegura que las distancias les hacen perder mucho tiempo en desplazamientos y esto repercute en la asistencia a los enfermos. «Las distancias, los circuitos y los aparatos han cambiado, y el personal está muy crispado porque no llegan», aseguró y explicó que «los propios familiares de los pacientes no les dicen nada porque ven que van de bólido e incluso les ayudan a hacer algún desplazamiento», lamentó.
«Es un hospital nuevo y muy bonito pero no es funcional», describió Arce, además al principio había muchos «defectos de mantenimiento, podían llegar a haber 500 incidencias diarias. Cada día te encontrabas con algo nuevo, no parecía que ibas a trabajar sino a arreglar problemas, todo esto suma y ha provocado que la gente esté tan crispada», aclaró.