Patrizia Longarini es una fotógrafa romana de reconocido prestigio a nivel mundial. Marta Torres es una destacada pintora que nació en Eivissa. La primera tiene el pelo corto y la otra largo y rizado. Una viste enteramente de negro, pantalón, jersey y camiseta. La otra con un vestido largo de tirantes totalmente rojo. Las dos a simple vista no pueden ser más diferentes, incluso físicamente. Sin embargo, pasados unos minutos de conversación, rápidamente uno repara en que ambas tienen muchísimas cosas en común, más allá de su sonrisa permanente. Ambas son galeristas en Eivissa, Patrizia de P|ART en Ca Na Negreta y Marta de la sala que lleva su nombre en el barrio de la Marina en Vila, y su manera de entender el arte es muy parecida. Las dos han desarrollado su carrera como artistas, apoyan a jóvenes que buscan una oportunidad, y por si fuera poco, durante más de tres meses han colaborado mutuamente. P|ART alquiló la galería de Torres para su exposición Fusión, y el resultado no ha podido ser más positivo.
—Acaban de terminar su primera colaboración juntas. ¿Cómo ha ido?
—Marta Torres: Ha sido muy positiva. He de decir que fue una iniciativa que vino directamente de Patrizia y desde el primer momento que me la propuso me pareció genial y muy interesante. Por eso no lo dudé ni un instante.
—Patrizia Longarini: Creo que ha sido muy beneficiosa para ambas partes. Nosotros buscábamos un lugar más céntrico en verano, que fuera conocido y elegante, para darnos a conocer a otro tipo de público, y lo hemos conseguido.
—¿Qué otro tipo de público?
—Patrizia Longarini: Diferente al que tenemos en nuestra galería P|ART de Ca Na Negreta. Para venir aquí hay que coger el coche y aguantar un poco de atasco, es decir, que el que acude es una persona a la que le gusta mucho el arte. Sin embargo, los que han pasado por Fusión, en la galería de Marta Torres han sido más turistas y curiosos que miran y compran. Incluso, algunos, después han venido hasta Ca Na Negreta a conocernos.
—¿Son necesarias más iniciativas como las suyas?
—Patrizia Longarini: Por supuesto. Cuanto más unidos estemos los artistas de Eivissa mucho mejor. Todos saldremos ganando.
—Marta Torres: Claro, la unión nos beneficia a todos, artistas y galeristas. Y todo en un momento tan complicado para el arte como el que estamos viviendo.
—¿Una situación complicada? ¿Por? Últimamente parece que hay más galerías privadas que nunca en la isla.
—Marta Torres: Es cierto que hay muchas pero luego duran muy poco. Hay pocas que consigan perdurar en el tiempo. Casos como el de mi galería, que lleva abierta 22 años abierta es muy excepcional. No le voy a engañar, incluso yo también he pensado más de una vez en tirar la toalla, pero luego van surgiendo nuevas ideas atrayentes y jóvenes artistas con ganas, que me animan a continuar.
—¿Se sufre mucho la eterna lucha del verano contra el invierno?
—Patrizia Longarini: Si. Desgraciadamente siempre estamos en lo mismo. Se abre para la temporada y luego cuando llega el frío todo se cierra y quedamos unos pocos. Es una pena.
—Marta Torres: Patrizia lleva razón. Yo misma no lo he conseguido pero tengo la fortuna de que suelo emplear el invierno para dedicarme más a mi faceta de pintora, a encerrarme en el estudio y crear nuevas obras. Además suelo emplear estos meses para viajar, hacer relaciones y conocer nuevos clientes que no puedan hacer crecer. No paro.
—En el tema de las galerías de arte, ¿se piensa más en los turistas que en los residentes de todo el año?
—Patrizia Longarini: Por supuesto. Muchas de las galerías de Eivissa abren sólo unos meses al año porque están enfocadas al público que viene de fuera. No es mejor ni peor, sino diferente. Nosotros en cambio intentamos cuidar más a la gente que vive aquí. Es una filosofía completamente diferente.
—En este sentido, ¿P | ART es un oasis?
—Patrizia Longarini: Puede ser. Pero para ello tenemos que hacer un esfuerzo enorme. De hecho, en noviembre cumplimos dos años abiertos y ha sido un período muy bonito pero también complicado. Tenga en cuenta que por aquí han pasado 55 artistas y esto solo ha sido posible gracias a un equipo increíble que está sacando adelante una galería que es completamente diferente a lo que hay en la isla.
—Marta Torres: Yo creo que Patrizia es muy valiente. Es alguien que está haciendo una importante y valiosa apuesta por el arte de nuestra isla y eso tenemos que agradecérselo tanto los artistas como los galeristas. Estaría bien que hubiera más gente como ella pero es complicado.
—Pero en P | ART han demostrado que se puede sobrevivir en invierno proponiendo exposiciones muy interesantes con grandes artistas...
—Patrizia Longarini: Eso es cierto pero a base de un esfuerzo muy grande. Traer a artistas internacionales que vienen de países tan lejanos como Estados Unidos o Nueva Zelanda supone un trabajo previo enorme que muchas veces el espectador de una exposición no repara en ello. Para que una obra esté colgada en nuestra pared hemos tenido que trabajar mucho.
—¿Y luego el esfuerzo merece la pena?
—Patrizia Longarini: Claro que sí. Es mucha la satisfacción de ver la obra en nuestra galería sabiendo que nuestro equipo se ha dejado el alma para que esto sea posible. Sin embargo, en ocasiones desde P | ART nos vemos un poco solos.
—¿Por?
—Patrizia Longarini: Porque no hay mucha colaboración entre las distintas galerías de arte de Eivissa. Cada una se mueve por su propio interés y no nos ayudamos nunca. Creo que haría falta más unión entre tiendas, galerías y hoteles, como la que ha habido entre Marta y yo para que todo fuera mejor. Desgraciadamente aún estamos muy lejos de conseguirlo.
—Escuchándola, parece difícil que se deje de asociar Eivissa con fiesta y desmadre. Es decir, parece complicado que nos tomen en serio en materia de arte.
—Patrizia Longarini: La verdad que sí. Guido Danielle me dijo que hacíamos un gran trabajo en este sentido pero mientras no nos unamos no iremos a ningún lado.
—Marta Torres: Esto también nos perjudica a los artistas. Parece que no hay sitios para aquellos que no tengan un nombre. Y estoy de acuerdo, hace falta más unión entre todos.
—¿Y por qué no la hay?
—Patrizia Longarini: Porque tenemos filosofías muy diferentes. Nosotros somos como un mecenas que busca compaginar nuevos artistas con otros más consagrados, mientras que otras galerías solo apuestan por grandes nombres para salir más en los medios de comunicación o tener más repercusión. Tenemos visiones muy diferentes sobre lo que tiene que ser una galería. Ni mejor ni peor, sólo diferentes.
—¿Y cuál es su visión?
—Patrizia Longarini: En P | ART no alquilamos las paredes de la galería a los artistas. Al revés, cedemos el espacio a los artistas que nos interesen. Nos sentamos, valoramos todo lo que nos llega, escuchamos a todo el mundo, y si entra dentro de unos parámetros que consideramos adecuados forma parte de nuestra colección.
—Marta Torres: Esta idea es muy importante porque abre un horizonte nuevo y muy positivo para todos aquellos que están empezando. Se lo digo como artista que soy y que en ocasiones he notado falta de sitios para jóvenes que están empezando, sobre todo en invierno.
—¿A su favor juega que las dos, además de ser galeristas son artistas?
—Marta Torres: Creo que sí. Eso es muy importante para tener sensibilidad a la hora de elegir a los artistas y también a la hora del trato con ellos. Yo casi me pongo en el papel de madre con los más jóvenes y les doy mi opinión sincera intentando aconsejarles para que puedan crecer. Yo lo he vivido, me pongo en su piel y los trato como me gusta que me trataran a mi cuando empezaba.
—Patrizia Longarini: El haber estado en el otro lado también es fundamental, sobre todo por lo que dice Marta, porque te ayuda a comprenderles. Y eso creo que al final es una ayuda muy importante a la hora de elegir tu catálogo.
—Entonces, ¿qué consejos les darían a los jóvenes artistas que nos estén escuchando?
—Patrizia Longarini: Que sigan adelante con esfuerzo y que pongan todo el corazón y la ilusión en lo que hacen. Al final, los esfuerzos tienen su recompensa. Y que vengan a P | ART, tenemos las puertas abiertas para todo el mundo.
—Marta Torres: Que tengan constancia. Esto es lo más importante para un artista. Y que no se dejen vencer por las dificultades, por los malos momentos, o por las apreturas económicas ni las malas críticas. El que la sigue la consigue.