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Infraestructuras – Plan global

APB prevé una marina con amarres sociales donde están ahora las barcas de Formentera

Las barcas de Formentera están actualmente en el muelle de Ribera, donde se ubicarán los amarres sociales cuando el tráfico vaya a los muelles comerciales. Foto: DANIEL ESPINOSA

| Eivissa |

El alcalde de Vila y la Autoritat Portuària presentaron ayer un «plan global» para el puerto de Eivissa que tiene como objetivo conectar con un paseo todo el puerto de «muro a muro», es decir, desde el muro del muelle viejo hasta las instalaciones de es Botafoc. En la documentación aportada por la APB se extrae que cuando se traslade el tráfico marítimo con Formentera a los muelles comerciales, que se hará cuando esté construida la estación marítima (las obras podrían iniciarse en dos o tres años, según destacó el presidente de la APB), habrá una mayor «circulación de pasajeros y peatones en general entre los muelles comerciales y los muelles de Ribera [donde están ahora las barcas de Formentera] vaya a crecer notablemente. Dentro de esta actuación se pretende una nueva distribución de viales, con zonas peatonales, nuevos pavimentos de mayor calidad y acorde en la zona en la que nos encontramos (...)».

«Se trata de un acuerdo global en el que el puerto de Eivissa se verá por primera vez de muro a muro. Tendremos un puerto que se podrá pasear de muelle a muelle, de muro a muro, eliminando de manera progresiva las barreras que separan el puerto de la ciudad», explicó el alcalde Rafa Ruiz. En este sentido, APB pedirá a las marinas deportivas Marina Ibia y Marina Botafoc que retire las vallas que se separan los muelles del paseo Joan Carles I.

Tráfico con Formentera

El gestor portuario recordó que la operativa del tráfico marítimo entre las Pitiüses se trasladará los muelles comerciales y que esto se hará efectivo cuando se haya construido la estación marítima para dar servicio. Sobre esta nueva estación marítima, que tendrá un coste de 7,4 millones para el gestor portuario, la APB ha presentado tres opciones a Vila, una de las cuales prácticamete está descartada al tratarse de dos plantas. «Con el fin de que los pasajeros y vehículos que realizan la ruta Eivissa-Formentera dispongan de los servicios necesarios (cafetería, espacio para venta de billetes, zona de espera, zona de prembarque de vehículos, zonas de aparcamiento de buses y taxis) se prevé la construcción de una terminal marítima, la creación de nuevas líneas de atraque y la creación de un nuevo tacón Ro-Ro», se extrae del documento inicial presentado por la APB. Esta estación marítima se gestionará íntegramente por la APB (incluida la explotación comercial). En el muelle de Ribera, donde están ahora ubicadas las barcas de Formentera, la APB prevé la creación de una marina con amarres sociales. «Desde la APB se observa la demanda de amarres que hay en la actualidad; es una demanda que no se podrá cubrir porque no hay más sitios para puertos deportivos y, al mismo tiempo, esta demanda provoca un aumento de precios que genera que no sean amarres asequibles para los residentes. Se debe tener en cuenta que para no quedar excluida una parte de la población de la práctica del mar debemos tener acciones de estas características», explicó Joan Gual de Torrella.

En cuanto a los plazos, el presidente de la APB destacó que podrían empezar a construirse tanto la que dará servicio al tráfico de Formentera como la nueva estación marítima que de es Botafoc en un plazo de «dos o tres años». Sobre la terminal de es Botafoc, Gual de Torrella destacó que la APB gestionará el uso portuario, mientras que se sacará a concesión el uso comercial de la instalación. En este caso, el plazo es el mismo que para la de Formentera.

Las obras ya ejecutadas y las que faltan para completar la reforma del puerto suponen una inversión global de 140 millones de euros de los que faltan por ejecutar alrededor de 50 millones.

LA NOTA

Joan Gual se pone a disposición de la junta de portavoces

“Entendemos que haya una cierta desconfianza por parte de los partidos políticos; no puedo rebatir esa falta de confianza diciendo que no tienen razón sino hablando con ellos y presentándoles el proyecto. Me pongo a disposición de la junta de portavoces de Vila para explicarles todo esto”, destacó Joan Gual de Torrella. Rafa Ruiz alabó la predisposición al diálogo del nuevo presidente del gestor portuario de Balears.

EL DETALLE

Plazos

Esta legislatura. El presidente de la APB quiere dejar acabados o bien iniciados en estos cuatro años los proyectos previstos para el puerto (estaciones marítimas y el párking soterrado).

140 millones

Inversión total. Los trabajos ejecutados hasta el momento y los proyectados en los próximos años suponen una inversión total de la APB de más de 140 millones de euros.

Barrera

Se mantiene la barrera de acceso al puerto. Vila mantiene la barrera que impide el paso de los vehículos a la fachada marítima porque el inicio de las obras es “inminente”.

Terrazas

APB traspasa la gestión a Vila. El presidente de la APB informó ayer de que están tramitando que sea Vila quien gestione “cien por cien” las terrazas de la primera línea del puerto.

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