La moda de Ibiza está de celebración. Este año la pasarela Adlib cumple su 45 edición y viene cargada de sorpresas. Todos los diseñadores que participan en esta cita tan especial se encuentran inmersos en los talleres para confeccionar sus colecciones. Piezas muy especiales que inundarán la pasarela de blanco, puntilla y un toque de color. Hoy entrevistamos al conocido Tony Bonet. Nacido en Ibiza, isla que le ha visto crecer como persona y como diseñador y quien conoce la moda desde bien pequeño.
Fiel al espíritu de la isla y a los principios de la moda ibicenca, confiesa ser meticuloso y perfeccionista. Inició sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios para formarse como decorador pero con el tiempo se dio cuenta que lo suyo era la moda y no dudó ni un segundo en lanzarse a ello. Cuando tenía tan sólo ocho años ya ayudaba a su vecina a coser botones y también a su hermana con trabajos de corte y confección. Siempre rodeado de telas, se considera producto ibicenco tras formarse y desarrollar su carrera en la isla. El éxito empezó a llamar a su puerta y desde ese momento la moda es su vida. Cuenta con una amplia trayectoria que le lleva a desfilar en diferentes pasarelas nacionales donde sus creaciones obtienen una repercusión importante.
En apenas unas semanas, el próximo 19 de abril, los diseñadores Tony Bonet, Elisa Pomar y Charo Ruiz participarán en la pasarela Costura España. Será allí donde el diseñador muestre un punto de inicio en la colección que presentará en la próxima Pasarela Adlib. Bonet cuenta que desfilar en Costura España representa un paso adelante en cuanto a imagen, publicidad y repercusión mediática para él, su marca y la moda ibicenca. «Todas mis creaciones están inspiradas en Ibiza y la fabricación y producción también. Me gusta propagar la labor que llevamos a cabo y así dar a conocer el buen trabajo de artesanos y costureras de la isla». Le han bautizado bajo el nombre de ‘l'enfant terrible', no conoce bien el origen de este apodo pero deduce que es por su toque personal, su imagen y la combinación de girasoles y calaveras, símbolos insignias de la marca. Le gusta dar un toque diferente a sus colecciones y nos cuenta que para él la moda es su pasión y diversión.
—¿Cuándo participaste por primera vez en la pasarela Adlib?
—Mis inicios fueron con mi hermano gemelo y presentamos la colección como Tony Bonet y Jose Bonet. Creo que fue hace diez años aproximadamente. Bailan un poco las fechas porque hubo una época en la que Adlib permitía que los estudiantes de Artes y Oficios y jóvenes diseñadores presentáramos nuestras colecciones. A partir del 2001-2002 mis diseños lucían para la firma Bianca. En 2011/12 cree mi propia marca, Tony Bonet Adlib Ibiza. De aquí en adelante he compartido desfiles y pasarelas con Elisa Pomar.
—¿En qué te inspiras para crear tus colecciones?
—Tengo un problema que es el horror vacui, el miedo al vacío. Me molesta ver una hoja en blanco, por eso necesito pintar, dibujar, rellenar… Pero para encontrar la inspiración a la hora de diseñar, necesito buena música. Me gusta escuchar música metal, Marilyn Manson, Rammstein… Pero también tengo otra faceta muy diferente, soy "Lolista", me gusta Lola Flores. Eso es lo que necesito a la hora de dibujar, la mezcla… Para mi, la moda y la música van de la mano, consiste en combinar estilos. En la moda no hay nada inventado, sigue en plena evolución. Tengo claro que me muevo y me baso en los orígenes de la moda Adlib, «viste como quieras pero con gusto» y en la filosofía de fusionar y divertirme.
—¿Novedades en esta nueva edición 2016?
—Este año voy a jugar mucho con las dos piezas. Tengo las ideas claras y quiero añadir algún nuevo detalle. Jugaré con flores y toques de color, algo con personalidad y estilo propio. Podremos ver alguna que otra sorpresa en esta nueva edición.
—¿Hay vida más allá del blanco?
Adlib es Adlib y el blanco va de la mano. Quien compra esta moda espera este color y la puntilla. Es lo que más vende. Pero con el tiempo hemos ido añadiendo diferentes tonos a las colecciones. A la hora de diseñar también nos gusta salir del blanco y de la puntilla e incluso del prototipo y la misma estética. Añadir colorido a mis diseños de una manera directa o indirecta. Por ejemplo, en mis vestidos de novia les añado un toque especial con detalles de color.
—¿Qué es para ti diseñar un vestido de novia?
—Yo no vendo vestidos de novia, vendo experiencias con las novias. Tengo mis prototipos de vestidos pero quiero que cuando una clienta viene a mi taller vea mi ropa, le proponga una idea, me diga el color que le gusta y así poder presentar el vestido con un fondo de color para destacar los detalles y las texturas de las telas. Me gustan los retos y también que las novias se impliquen en la experiencia pero sobre todo, divertirme con todos y cada uno de mis diseños.
—¿Quién es tu musa?
—No tengo y tengo muchas. Soy adorador de Marilyn Monroe y Marlene Dietrich. Me gustan las mujeres con personalidad, con estilo propio, fuertes y poderosas. Pero realmente no tengo estereotipos que me inspiren. Más que una mujer me inspira la personalidad. Como te decía anteriormente, la música me sirve de mucho a la hora de diseñar.
—¿Alguna manía o superstición antes del desfile?
—Como diseñador tengo la manía o necesidad de crear todos los prototipos, dibujar los bocetos, patronarlos, cortarlos y coserlos por mi mismo. Una manía antes del desfile es que nadie ajeno al taller puede ver mi colección. Y, por otro lado lo que hago para relajarme es planchar los diseños que van a salir en pasarela. Como colofón final a mi trabajo, me gusta que en los desfiles suene la música con la que me he inspirado para diseñar la colección de esta manera cierro el ciclo como lo he empezado. Y como no, que cada desfile que llevo a cabo nos acompañen los girasoles.
Tras esta entrevista, sólo podemos esperar a que el diseñador ibicenco nos sorprenda en todos y cada uno de sus desfiles y así demostrar una vez más su talento.