«Estuve 10 años esperando a mis hijas, aunque ya tenía una hija biológica, pero cuando me separé quería tener más hijos. Acudí al Servicio de Protección del Menor y tardaron un año en decirme que era apta para la acogida. Después de esto tardaron 8 años en darme a mis hijas». Sin embargo, Esperanza, (nombre ficticio), no dejó de renovar su solicitud cada año para conseguir su objetivo. Y el premio llegó, después de 3 meses de periodo de adaptación y con el visto bueno de la hija biológica, que ya es adolescente, comenzó una convivencia. «Es una experiencia maravillosa a pesar de que los niños traen cosas de su pasado». Para ellas es un cambio grande vivir en familia «pero las niñas han cambiado cada vez están más seguras», dice.
A Flor, (nombre ficticio), le surgió la idea de acoger a un niños un día que veía la televisión. Ella no podía tener más hijos, ya tenía un varón, y se decidió por esta opción que no conocía hasta entonces. El proceso también fue muy largo, «y cuando ya casi habíamos tirado la toalla nos llamaron para, en 10 días, decidir si queríamos acoger a dos hermanos». Así es que Flor dio el si y allí empezó su experiencia que «aunque dura es muy gratificante». A Flor le encantan los niños por eso no entiende porque sus hijos estaban en un centro por años, mientras ella esperaba en casa. Además asegura, «te sientes un poco solo, si los niños vienen con algún problema, no tenemos formación». «Se supone que yo soy la acogedora, la que abraza, la que protege y quiero tener herramientas para hacerlo».
Además, tanto Flor como Esperanza, que no son las tutoras de los niños sin que solo tienen la guarda y custodia, se sienten desamparadas al no tener las 24 horas un servicio de apoyo disponible. «Por ejemplo si un niño se pone malo, tiene un accidente o pasa algo en fin de semana o por la noche, nosotros no podemos firmar nada, tenemos que esperar al Servicio de Protección». Por esto, solicitan un contacto abierto con Menores las 24 horas los 365 días del año.
7 familias de acogida se han constituido en la Asociación Abrazos y solicitan, asimismo, cobrar unas prestaciones mes a mes y no con la subvención actual que se retrasa este año desde diciembre.