Los propietarios de la urbanización Vista Alegre de es Cubells desmontaron ayer una gran puerta que cerraba el paso a la playa de sa Caixota, en el municipio de Sant Josep. Su retirada se produjo solo unas horas después de que fuera instalada por varios operarios contratados por la propiedad de esta finca, que conecta a través de unas escaleras con el acceso a la pequeña playa de la costa josepina.
Una vecina que trataba de bajar a la cala a primera hora de la mañana dio la voz de alarma y, tras atestiguar mediante imágenes que se estaba instalando el portón, la Associació de Vesins des Cubells puso en conocimiento de la Policía Local y el Ayuntamiento, a través del concejal de urbanismo y el alcalde josepí, Josep Marí Ribas ‘Agustinet', la colocación de dicha estructura. También informaron a la Demarcación de Costas, que confirmó que no está permitido obstaculizar el paso a la playa.
Según habrían manifestado los propietarios de Vista Alegre, la colocación de dicha puerta era una medida preventiva contra los robos y el acceso de personas ajenas a la urbanización, si bien se habrían comprometido a que permaneciera abierta durante el día.
El Ayuntamiento comprobó que dicha instalación carecía de autorización y envió a la Policía Local para instar a los dueños del complejo a su retirada, que se hizo efectiva a mediodía.
Además de la ley de Costas, que garantiza el libre acceso a la playa, desde la asociación vecinal recordaron que los anteriores propietarios de la finca, vecinos de es Cubells, se reservaron en las escrituras de venta el derecho a poder atravesar esta zona edificada para bajar a la cala.
Sa Caixota es una playa aislada y poco transitada, de unos 300 metros de largo y 13 de ancho, a la que se accede a través de unas escaleras de piedra construidas hasta la misma arena.