El contingente de la UME puso ayer punto final a su destacamento en Ibiza después de 3 meses y medio que han servido para preparar la base en el antiguo acuartelamiento de sa Coma.
A primera hora del día, los tres vehículos autobomba, el camión de material y los vehículos ligeros abandonaban la que ha sido su base este verano rumbo al puerto de Ibiza.
Los efectivos de la unidad del tercer Batallón de Intervención de la UME (BIEMIII) con sede en Bétera regresaron a Valencia, una vez finalizada su misión de apoyar y reforzar el dispositivo estival contra incendios en estrecha coordinación con Emergencias del Govern.
La presencia de este destacamento fijo en Ibiza permitía una respuesta más rápida ante una posible intervención en la temporada de verano, el periodo de mayor riesgo de incendios en la isla.
El teniente coronel del tercer Batallón de la UME, Javier Moreno, subrayó el día de su llegada que la presencia de la UME era un hecho destacado y un sueño cumplido, ya que los efectivos podrían atacar un fuego en menos de tres horas. Años atrás, el desplazamiento de los vehículos y medios se podía demorar más de 10 horas desde la activación de la alerta.
Este primer objetivo, que fue impulsado por la Delegación del Gobierno , tiene un horizonte más ambicioso, la creación de una base permanente en Ibiza en el plazo de dos años.