El pleno del Ayuntamiento de Eivissa aprobó ayer, con los únicos votos a favor de PSOE y Guanyem y el ‘no' de toda la oposición, los presupuestos municipales para 2017 que ascienden a 53 millones de euros, un 3,2 por ciento más que los del año pasado.
El primer teniente de alcalde de Vila, Alfonso Molina, encargado de defender las cuentas, se avanzó a las críticas de la oposición, que sostuvo que los presupuestos responden «al sometimiento del PSOE hacia Guanyem». Molina destacó que la construcción del futuro Centre Municipal d'Acollida (CAM) «pone por delante a los que más lo necesitan» y permitirá mejorar el actual servicio que se ofrece ahora «en condiciones precarias».
La concejala popular María Fajarnés criticó que las cuentas municipales «privilegian» las áreas de gobierno de Guanyem para mantener «el pacto y sus poltronas», ya que destinan una partida de 30.000 euros anuales para la contratación de un cargo de confianza en el área de Comunicación elegido por el partido liderado por Joan Ribas.
Fajarnés criticó, además, que la reducción en un 22 por ciento de las inversiones para los barrios de Vila «sólo dan para pequeñas reformas y parches» y lamentó que se destinen partidas «fantasma», dedicadas a redactar proyectos por parte de empresas privadas.
El concejal de EPIC, Antonio Villalonga, con el programa electoral de Guanyem en la mano, se dedicó durante todo el pleno a resaltar las «contradicciones» de este partido con las decisiones adoptadas durante su mandato y criticó que no se haya realizado un estudio sobre los efectos que tendrá la instalación del futuro albergue en el antiguo retén de la Policía Local de Vila.
En su turno de réplica, Molina, quien dijo que «volvería a firmar de nuevo el acuerdo de gobierno con los ojos cerrados», centró sus críticas en la gestión del PP en la pasada legislatura. «En los dos presupuestos que llevamos ya hemos hecho más inversiones que ustedes en toda la anterior legislatura», recordó. Asimismo, respondió a las críticas sobre el retraso en la renovación de la contrata del agua y anunció que pronto habría novedades al respecto. «No han sido capaces todavía de sacarla a licitación, ni siquiera saben si van mancomunar el servicio», señaló por otra parte Fajarnés, mientras que el primer teniente de alcalde acusó a los populares de «decir que el pliego estaba hecho y luego no había nada».
Además, la portavoz popular, Virginia Marí, advirtió que los presupuestos municipales pueden acabar en los tribunales por «imprudencias» como el aumento de las retribuciones del personal del Ayuntamiento. Marí criticó además que, entre los nuevos puestos de trabajo que se contemplan, «hay mucho patrón para muy poco marinero».
La concejala de Policía Local y Recursos Humanos, Estefanía Torres, explicó además que el Ayuntamiento hará una serie de contratos a través del SOIB por valor de 218.000 euros destinados a parados de larga duración o jóvenes en busca de su primer empleo pero aclaró que «no son plazas de la plantilla del Ayuntamiento».
LA NOTA
La empresa municipal IMVISA, liquidada en octubre
IMVISA, la empresa municipal creada durante la legislatura de la socialista Lurdes Costa para la promoción de viviendas se liquidará el próximo octubre, tal y como avanzó el primer teniente de alcalde de Vila.
Desde la bancada del PP, María Fajarnés criticó que IMVISA «haya sido el mayor pufo del Ayuntamiento de Ibiza que no ha cumplido otro objetivo que el de crear un agujero de 9 millones de euros».