El pleno del Ayuntamiento de Sant Joan de Labritja aprobó ayer una modificación de la Ordenanza Municipal de Convivencia Ciudadana por la que se prohíbe el botellón en el municipio y se permite a la Policía Local «el decomiso inmediato» de las botellas «para su vaciado inmediato en los contenedores pudiendo invitar a los responsables, en su presencia, a llevar a cabo estas operaciones».
La nueva ordenanza también contempla la prohibición del consumo y venta de bebidas alcohólicas a los menores de 18 años, «tanto en lugares de expedición como de consumo», así como la práctica de la mendicidad y la petición de dinero o limosna.
De la misma manera, la actualización de esta ordenanza también establece la prohibición de «encender fuegos, la utilización de hornillos, la utilización de juegos malabares con fuego u otras actividades pirotécnicas sin la preceptiva autorización municipal y de las administraciones competentes durante el periodo que establezca la Conselleria de Medi Ambient balear».
Otra de las novedades de la ordenanza aprobada ayer por el pleno de Sant Joan es la prohibición de la prostitución en las calles del municipio así como la captación de clientes, además de la práctica del nudismo y del exhibicionismo en lugares públicos y el consumo de drogas.
«Todas estas cuestiones no estaban contempladas en la anterior ordenanza», destacó el alcalde de Sant Joan, Antoni Marí.
En el pleno de ayer se aprobó la concesión de becas para estudiantes universitarios durante el curso 2016/2017 que ascienden a 21.000 euros. «No se ha gastado todo el dinero, pero sí hemos podido atender todas las peticiones que hemos recibido», señaló Carraca.
También se aprobó la bonificación del 75% en la tasa sobre vehículos para los coches eléctricos y en un 50% para los híbridos, a petición del Partido Popular, mientras que también se le dio el visto bueno al reglamento de la agrupación de voluntarios de Protección Civil y al reglamento de uso y funcionamiento de las instalaciones deportivas municipales.