El director insular de Turisme, Vicent Torres ‘Benet', señaló ayer que el alquiler de caravanas y tipis, incluso de camas en garajes como forma de alojamiento es una «barbaridad» y una situación «inhumana», pero reiteró que el Consell d'Eivissa tiene «las manos atadas» para atajar esta dramática tendencia.
Benet lamentó ayer la situación por la que atraviesan multitud de familias y de trabajadores frente al drama de los alquileres en Ibiza y recordó que la modificación legislativa de la Ley de Turismo de Balears dotará de más herramientas a la institución para combatir los abusos. «Para nosotros es básico para frenar el maremagnum que tenemos. También hemos pedido la modificación de la LAU, pero no tenemos respuesta», indicó.
El Consell d'Eivissa adelantará al mes de abril las campañas de inspecciones contra el intrusismo en este sector y de detección de anuncios irregulares mediante el programa informático que contrató el año pasado. A través de esta plataforma, explicó Benet, se detectan los anuncios que no tienen el número de registro de la licencia de alquiler turístico y se realiza un requerimiento, pero la mayoría de veces, lamentó, no finaliza con éxito el procedimiento administrativo. En este sentido, el responsable del departamento insular de Turisme insistió en que muchos propietarios «se amparan» en la ley estatal de arrendamientos urbanos (LAU) para evitar las sanciones, que «en los casos en los que se ha podido demostrar la actividad turística irregular pueden alcanzar los 40.000 euros». «Aunque no es excusa, no podemos contratar personal y estamos con las manos un poco atadas», señaló.
Benet reconoció que «cualquier ayuda es poca», como es el caso de las denuncias vecinales, pero reiteró que se enfrentar a la «imposibilidad de demostrar que se hace un uso turístico y no residencial» del inmueble.
En relación a este asunto, Benet precisó que «es difícil actuar contra empresas» como Airbnb (donde se alquilan hasta tiendas de campaña y caravanas para alquilar en Ibiza) porque «radican en países extranjeros y ni siquiera tienen representación en España».
El Consell mantendrá a lo largo de las próximas semanas reuniones con los ayuntamientos para coordinar actuaciones que consigan disuadir de estas prácticas irregulares, y explicó que se ha estrechado la colaboración tanto con la Agència Tributària de les Illes Balears como con la Hacienda estatal para poner cerco a los defraudadores.