La demanda de los ciudadanos británicos para adquirir una propiedad en Ibiza está por debajo de las cifras de 2016 por el ‘Brexit' y el posterior debilitamiento de la libra, con una caída del 49% de las consultas realizadas en el primer trimestre del año con respecto a los tres primeros meses de 2016, según datos de la agencia Lucas Fox International Properties.
«La votación del Brexit ha tenido un impacto notable en el comportamiento de los compradores británicos que hasta hace apenas un año eran muy activos en la Isla», explicó ayer la directora de Lucas Fox Ibiza, Susana Sánchez.
En los últimos meses, la agencia inmobiliaria ha apreciado un retorno de compradores británicos a la isla y ha detectado un mayor interés por parte del comprador nacional que sigue afianzándose en el mercado inmobiliario ibicenco. Franceses, holandeses y alemanes están siendo también especialmente activos, sobre todo en el norte de la isla», añadieron desde la empresa.
Así, el número de compradores españoles en el mercado inmobiliario de Ibiza ha aumentado un 30% durante el primer trimestre de 2017. Siguiendo esta tendencia positiva, las consultas por parte de ciudadanos franceses han ascendido un 60% durante este mismo periodo.
A pesar del peso de este grupo de compradores, Lucas Fox Ibiza ha registrado un ascenso del 5% en el número total de consultas realizadas por compradores nacionales e internacionales durante este mismo período.
El último informe de la compañía arroja también datos alentadores para el conjunto del Estado, ya que en los tres primeros meses del año las consultas de propiedades realizadas a través de la empresa se han incrementado un 43%.
Estas cifras coinciden con las últimas estadísticas del Instituto Nacional de Estadística (INE) que muestran un aumento en el número de transacciones inmobiliarias realizadas en Ibiza durante el primer trimestre de 2017. De acuerdo con las cifras del INE, las ventas en la Isla han crecido un 24 por ciento respecto al primer trimestre de 2016 y un 51 por ciento respecto a 2015.