Pasaban cuatro minutos de las 22.00 horas, y el constante aleteo de abanicos dejaba entrever que la noche del 4 de agosto iba a ser de calor, y mucha, para nuestros protagonistas. Esta vez el emplazamiento se ubicaba en el parque Reina Sofía de la ciudad de Ibiza, donde se podía disfrutar de un concierto gratuito dentro del programa de eventos de les Festes de la Terra. El sonido estaba listo, los focos dibujaban estelas infinitas en el cielo y el público aguardaba expectante a los artistas.
Minutos después, la conocida banda encabezada por Javier Enzo saltaba al escenario entre luces y humo con un popurrí de canciones que comenzaron haciendo las delicias de los allí presentes: Me gustas mucho de Rocío Dúrcal, Será que no me amas de Luis Miguel, Lady, Lady del grupo Bravo y el conocido Saca el güiskie Chely de Desmadre 75 provocaron que muchos de los asistentes se levantaran y se animaran a imitar las coreografías de la popular banda de versiones.
Poco a poco, la mayor parte del público fue entrando en calor, y para el segundo popurrí nadie quiso estar sin pareja con quien compartir un rato de bailes y risas. Al mismo tiempo, encima del escenario el desparpajo rebosaba con décadas de experiencia; coreografías dos a dos, en grupo, voces en coro, voces en solitario, y todo ello acompañado de incontables interacciones con el público que hicieron de la velada una experiencia más íntima y amena. Además, durante este segundo baño de música pudimos disfrutar de algunos clásicos como América de Nino Bravo, Corazón contento de Marisol, Quince años tiene mi amor del Dúo Dinámico, y Quiero estar borracho de Los Brincos entre otros éxitos.
Pasado el ecuador de la actuación, los cuatro componentes del grupo se dirigieron a los espectadores con una divertida propuesta de juego, en la que seleccionarían a seis personas para acompañarlos bailando y cantando una serie de canciones.
Posteriormente sería el propio público quien, a través de sus aplausos, decidiría el ganador. Tanto Javier como Jesús bajaron del escenario ante unos seguidores entregados para reclutar a los voluntarios que, junto a ellos dos, Patrizia e Iris exhibieron todo su potencial interpretando un extenso popurrí que incluía canciones como Buscando en el baúl de los recuerdos de Karina, Cuéntame de Formula V, Fin de semana de Los Diablos y La la la de Massiel.
Para concluir la actuación, hicieron un breve repaso por el pop español de los años 80 y 90, con clásicos como Hoy no me puedo levantar de Mecano, La Puerta de Alcalá de Ana Belén y Víctor Manuel y Hombre lobo en París de La Unión, con las que terminaron de conquistar a todas las generaciones presentes. Tras dos horas de concierto llegó el momento de despedirse, y ante las incesantes peticiones de «una más» por parte del público, La Década Prodigiosa hizo gala de su trayectoria para dedicar a todos los asistentes su éxito Made In Spain La Chica Que Yo Quiero con el que representaron a España en Eurovisión en 1988.
Todos los que disfrutaron de la actuación en directo, pudieron comprobar la seriedad y profesionalidad de este grupo de artistas que han sabido aportarse individualmente lo que les ha hecho grandes a título colectivo. Una mezcla de dulzura, folklore, elegancia y rock en las voces que deja claro el motivo de su éxito más de treinta años después, y que los convierte en una de las entidades mas longevas de nuestra música.