Un grupo de alumnos alemanes y de Sant Antoni de 13 y 14 años están tendiendo estos días una línea directa entre Barsdbütter, un pueblo a unos 15 kilómetros de Hamburgo, e Ibiza, gracias a la iniciativa puesta en marcha por tercer año consecutivo por la profesora de alemán Mónica Contreras.
Según explicó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera esta profesora interina que durante este año trabaja de forma itinerante en los institutos Quartó de Portmany y Sant Agustí, la intención es que entre ellos se establezcan vínculos afectivos además de que conozcan que en otros lugares del mundo hay quien está estudiando su misma lengua. «Tanto la profesora del otro instituto como yo tenemos muy claro que ninguno va a terminar hablando alemán o castellano fluido durante estos días porque apenas llevan cinco meses estudiando pero sí que se llevarán una experiencia vital que se les quedará en la mente para siempre», comentó Contreras.
Para que esto sea posible, los ocho alumnos alemanes están residiendo con familias de Ibiza y luego, junto a sus otros ocho compañeros ibicencos, están participando en distintas actividades coordinadas por la profesora. Por ejemplo, el jueves, invitados por el instituto Quartó de Portmany, acudieron junto a otros estudiantes a Cala d'Hort para participar en actividades lúdico educativas y después a Ses Salines. Y ayer, todos juntos, divididos en grupos de cuatro, estuvieron en el mismo instituto asistiendo a clases del módulo de FP Básico de Peluquería y a las representaciones teatrales que forman parte de los exámenes de Semana Santa de los alumnos del Bachillerato de Artes Escénicas. Y después, tras pasar un fin de semana de convivencia, el lunes participarán en una gynkana por Dalt Vila que les han preparado los alumnos españoles con preguntas en alemán.
«Menos alumnos que otros años»
La profesora Mónica Contreras explicó también que este año han llegado a Ibiza menos alumnos que en las ediciones anteriores, cuando nos visitaron unos 15 y ella trabajaba como profesora de alemán en el IES Sa Serra. Además, desgraciadamente, en 2018 los alumnos ibicencos no podrán devolver la visita que tradicionalmente se hacía durante el mes de mayo. «Este año sólo hemos encontrado seis familias a las que les interesara la idea de que sus hijos viajaran a Alemania, pero después, al ir pasando el tiempo y encareciéndose los billetes, ninguna podrá viajar hasta Barsdbütter», lamentó Contreras.
Además, aseguró que en Alemania no acaban de entender que una profesora tenga plaza de interina. «Allí, dentro de cada centro educativo tienen como proyecto curricular de centro el intercambio con alumnos españoles y por eso, el director del centro de Barsdbütter, no acaba de entender cómo aquí no dedicamos más esfuerzos a que esto sea posible y cómo una profesora tiene una plaza de interina rotando de centro en centro sin saber cual le va a tocar el año que viene».