«Han sido tres días muy duros, con momentos de esperanza porque mi hermano es un hombre muy fuerte, pero sobretodo de incertidumbre y miedo cada vez que sonaba el teléfono. Afortunadamente, este mediodía [por ayer] ha llegado la llamada que deseábamos y estamos muy agradecidos a todos los que han colaborado en la búsqueda de Robert, a los amigos y vecinos, al dispositivo de búsqueda, a la gente de la iglesia, y a la difusión que le habéis dado vosotros: muchísimas gracias». Eran las palabras de Sandra, hermana de Robert Allan, a las puertas del centro de Salud de Santa Eulària donde su hermano había sido trasladado para realizarle una revisión médica después de más de 72 horas perdido en una zona boscosa de Siesta. La pesadilla que arrancó la tarde del martes finalizaba felizmente ayer a mediodía con la localización del hombre de 69 años en el interior de una frondosa finca privada localizada a la altura del kilómetro 1,5 del camí de sa Font, un punto relativamente próximo al lugar donde desapareció.
«El primer día de búsqueda en Siesta pensamos: ‘lo encontrarán esta noche', pero no apareció. Al día siguiente estábamos ya mucho más preocupados, y esta mañana ya era mayor la incertidumbre porque veíamos que ni el helicóptero ni los barcos daban con su rastro», indicó Sara a Periódico de Ibiza y Formentera y TEF-TV.
Visiblemente emocionada y agradecida a todos los que han puesto un grano de arena en la localización de Robert, Sara advirtió que su hermano se encontraba «muy débil y presentaba algunos rasguños, pero su fortaleza y el hecho de que hace yoga seguro que le ha ayudado a pasar tres noches a la intemperie», advirtió la hermana del hombre que está enfermo de alzhéimer y ha aguantado todos estos días sin medicarse. «Creo que si hubiese estado más débil, no habría aguantado ahí fuera sólo», apostilló.
La hermana de Robert, que se desplazó desde Liverpool tras ser alertada de la desaparición, añadió que en el momento en el que se iban a desplazar a Vila para distribuir carteles «fue cuando recibimos la llamada que nos anunciaba su localización. Afortunadamente, está vivo y la pesadilla ha acabado. Mi hijo viene mañana y en Inglaterra todo el mundo estaba extremadamente consternado», indicó antes de reiterar el «máximo agradecimiento a la isla y a todo el dispositivo de rescate».
Instantes después, su hermano Robert abandonaba el Centro de Salud de Santa Eulària junto a su hija y eran acompañados en un coche de la Guardia Civil hasta su domicilio. «Está muy confundido y débil pero ahora en casa estará con la familia, descansará y recuperará las fuerzas», apostilló.
Localización en un bosque
Robert Allan Malloy fue localizado en una zona boscosa donde se habría refugiado los últimos tres días tras desorientarse. Según fuentes de la Guardia Civil, fue el dueño de la finca y su perro quienes dieron con Robert y alertó al dispositivo de búsqueda que se encontraban por la zona formado por Policía Local de Santa Eulària, Protección Civil y Emergencias. La localización de Robert se produjo apenas tres horas antes de la realización de una intensa batida general por la zona.
LA NOTA
Tres días de búsqueda de Robert por tierra, mar y aire
En torno a las 14.00 horas, el servicio 112 anunciaba la suspensión de la búsqueda tras la localización de Robert Allan «en buen estado». Se ponía fin a tres jornadas de intensa búsqueda en varios puntos del municipio de Santa Eulària por parte de un dispositivo que movilizó a Policía Local de Santa Eulària, Protección Civil, Emergencias, vecinos y diversas unidades de la Guardia Civil, que movilizó a la embarcación de los GEAS, el helicóptero y la unidad canina para localizar el rastro de Robert Allan Malloy.