«No ha habido la tensión de hace dos años, pero la sesión se ha prolongado casi cinco horas y la sensación general es que el proceso vuelve a ser una tanto caótico». Así se manifestaron ayer varios de los más de cien licitadores que asistieron al salón de plenos del Ayuntamiento de Sant Josep para presenciar la apertura de los sobres número 3 del proceso de licitación de los servicios de playas del municipio.
La jornada arrancó minutos después de las 10.00 horas. La teniente de alcalde, Paquita Ribas, fue la encargada de explicar cómo iba a llevarse a cabo la sesión y avanzó que dos licitadores ya no concursaban tras no pasar la primera criba. Acto seguido se trasladó a la sala la caja precintada que guardaba los sobres con las ofertas técnicas. Los pequeños problemas para abrir la caja levantaron el primer runrún en la sala. Algunos de los presentes también advertían ya su «incomprensión» a algunos de los criterios marcados por la mesa.
Además de los dos licitadores que ya habían sido excluidos, Ribas anunció los nombres de otra media docena que no cumplen alguno de los requisitos y que se pueden acoger a un periodo de alegaciones. Tras estas primeras explicaciones, la sesión continuó con la apertura de todos los sobres y la lectura pública de los compromisos, o no, que están dispuestos a asumir los licitadores.
Las ofertas económicas se abrirán después de que la mesa evalúe los criterios medioambientales, sociales y técnicos, que supondrán el 60 por ciento de la puntuación. La creación de puestos de trabajo para personas con dificultades para acceder al mercado laboral o la aportación a las Oenegés tendrán un gran valor. Fuentes municipales explicaron que muy pocas empresas se han comprometido a instalar baños en la playas pero sí son mayoría las que han incorporado en su oferta una serie de compromisos medioambientales y sociales.
Entre los concesionarios, las críticas apuntan al elevado precio de salida de algunas hamacas y la disparidad entre lotes ubicados en una misma playa, así como el «precio» que tienen que pagar los contratistas para garantizar la seguridad en las playas, ya que se deberán hacer cargo de una parte del servicio de socorristas. «El Ayuntamiento se ahorra unos 300.000 euros por un servicio que debería ser responsabilidad suya», apuntan.
Lotes de playa
Sant Josep ha sacado a concurso un total de 90 lotes para la temporada 2018, 5.710 hamacas repartidas en 22 playas. Las ofertas serán a sobre cerrado y el Consistorio prevé de salida unos ingresos de 1.935.980 euros, según los diferentes cánones marcados de salida.
Dos millones de euros iniciales frente a los 4.607.200 euros alcanzados en la subasta de 2016.