El juzgado de lo Penal número 1 de Ibiza dictó en febrero una sentencia absolutoria para los responsables de la empresa encargada de las obras en el cementerio de Sant Joan juzgados por un delito contra los derechos de los trabajadores y otro de lesiones por imprudencia.
La sentencia firmada por la magistrada Clara Ramírez de Arellano señaló que «la conducta de los acusados no reúne los requisitos necesarios para constituir los delitos imputados».
Los hechos juzgados se remontan al 31 de enero de 2014, cuando Jorge G.O., se precipitó desde un andamio de una altura de más de dos metros. El fallecido trabajaba como oficial de mantenimiento para la empresa Pompas Fúnebres, contratada por el Ayuntamiento de Sant Joan para el mantenimiento del cementerio municipal.
Aunque por la vía penal tanto Pompas Fúnebres como el Consistorio quedaron absueltos, la vía social ha dado la razón a sus familiares. Así, la sentencia del Juzgado de lo Social 1 de Ibiza condena conjunta y solidariamente a Pompas Fúnebres y al propio Ayuntamiento de Sant Joan a indemnizar a las herederas del trabajador fallecido con motivo del accidente que este sufrió «dada la falta de vigilancia, diligencia y la dejadez de estos sobre la seguridad de sus trabajadores», según ha señalado la representación legal de la familia.
«Pese a que la magistrada del juzgado de lo Penal no consideró responsabilidad penal alguna (lo cual ha sido recurrido por las herederas ante la Audiencia Provincial de Palma), por el contrario, en el ámbito laboral sí que se ha considerado la existencia de responsabilidad por parte de la empresa y del ayuntamiento dada su falta de actuación en relación a las medidas de seguridad obligatorias que debían facilitarle a sus trabajadores», añaden.
De momento, la Sentencia a día de hoy no es firme y podrá ser recurrida por las partes. Asimismo, el 25 de mayo se reunirá la Audiencia de Palma por lo que, en el mes de junio, se obtendrá la resolución de la misma.