La gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Carmen Santos, espera que la reforma del edificio J, el antiguo hospital Can Misses, pueda empezar a comienzos de 2019. «Si todo va bien a principios del año que viene se podrá empezar a ver obra», dijo la gerente. Las obras tienen un plazo de ejecución de un año con lo que la legislatura acabará sin terminar con este proyecto, que contempla la Unidad de Convalecencia, el traslado del centro de salud de Can Misses y la ampliación de la residencia para personal, entre otros.
Santos se desplazó el miércoles pasado a Palma para tener varias reuniones en el Servei de Salut y en una de ellas se abordó el tema de la reforma del antiguo hospital con el director gerente del Servei de Salut de Balears, Juli Fuster. «Abordamos el tema del edificio J para aclararlo ante el temor de que si estaba parado pero tenemos que decir que no, que el Servei de Salut sigue adelante con el proyecto».
Niega el bloqueo
La gerente negó que estuviera bloqueado y explicó que el proyecto se encuentra en la parte administrativa previa a la adjudicación y licitación de las obras. «Entregamos el proyecto hace meses, en diciembre, y en estos meses se trabaja en la parte administrativa en todo lo que conlleva el proyecto y su ejecución que concluirá, probablemente, en una licitación pública». Hasta que no finalice la parte administrativa no se puede hacer la licitación pública y que salga la empresa que gane el concurso no se puede empezar a hablar de la fecha del comienzo de las obras, pero antes tendrán que determinar si se opta por la licitación pública o es la concesionaria.
Santos explicó que el edificio del antiguo hospital pertenece a la Tesorería pero la concesionaria, que gestiona los servicios no sanitarios del nuevo hospital, es la empresa que explota el edificio por lo que la administración ha de llegar «a los acuerdos administrativos previos al comienzo de la obra».
Concesionaria
De hecho, ahora se estudia la posibilidad de que las reformas salgan a licitación pública o que sea la concesionaria la que acometa las obras de reforma. «Los servicios centrales del Ibsalut están viendo los trámites administrativos para ver que es lo mas conveniente. Está en la fase final de la parte administrativa y esperamos que en breve haya una resolución firme para ir por un camino o por otro. Se está trabajando para que las obras puedan empezar lo antes posible».
La Conselleria de Salut dispone de una partida presupuestaria para esta obra que ha sido declarada de interés autonómico. «Tenemos un aval muy grande», apostilló la gerente.
Santos expresó al director del Ibsalut «la necesidad que tenemos del proyecto del edificio J, no podemos renunciar de ninguna manera; necesitamos dar salida a la parte sociosanitaria, que no tenemos resuelta; y el centro de salud de Can Misses tiene que estar reubicado en su zona y no en otra; es una deuda que tenemos».
LA NOTA
La consellera aseguró que estaría antes de junio de este año
Los plazos iniciales de la Conselleria de Salut no se cumplen. De hecho, en la presentación del proyecto de esta primera fase de reconversión del viejo hospital Can MIsses en octubre de 2016, la consellera Patricia Gó- mez calculaba que las obras pudieran estar acabadas a finales de 2017 «o antes de junio de 2018». Las únicas obras acometidas en el edificio J han sido la remodelación de la antigua planta de pediatría para acoger la residencia para los profesionales y dar una solución temporal al problema de la vivienda. La reforma del edificio J contempla una ampliación de la residencia que se retrasa.