Rugido de motores, acrobacias imposibles, derrapajes y ejercicios de alto riesgo es lo que pudieron ver ayer los primeros espectadores del Monsters World Tour, que desembarcó por primera vez en Ibiza para deslumbrar al público.
En total, movilizaron 35 tráilers y más de 500 toneladas de material entre los que destacan los gigantes ‘monster trucks' con más de tres metros de altura, seis toneladas de peso e impulsados por motores que alcanzan los 1.400 caballos de potencia.
«Es un espectáculo auténtico, único e inimitable. El show que presentamos en Ibiza es el genuino, donde además presentamos por primera vez en España a Race Monkey, el monster truck ganador de las mayores competiciones en Estados Unidos con motor supercharger a metanol, construido especialmente para explosiones cortas de alta potencia y con las ruedas más grandes del mundo», explicó Peter Stey, promotor del evento.